Hablar de Honduras es referirnos a uno de los antecedentes precolombinos de la República Dominicana, ya que una de las etnias indígenas que habitaron a la Hispaniola fue originaria del norte Honduras, el grupo de indígenas que habitó en el sur de la Isla y que era el más atrasado ya que estaban en la época lítica y vivían en las cuevas marinas, según nos reporta Marcio Veloz Maggiolo en su tesis doctoral .

De todas maneras, estudiar la situación hondureña desde una perspectiva geopolítica, debe ser enmarcada en los antecedentes inmediatos:

1º Honduras no sufrió los efectos de la Guerra Civil en el último cuarto de siglo XX; siendo utilizada como base de operaciones de la contra nicaragüense, por lo que su dinámica militar fue reforzada y los regímenes civiles sucesivos fueron dependientes de esta realidad.

2º La democracia hondureña es la menos participativa y el movimiento de izquierda fue muy reprimido, sin la potencia de los países vecinos, que son actualmente gobernados por gobiernos de “izquierda” electos democráticamente.

3º El ejercicio del Presidente Manuel Zelaya ha sido de enfrentamientos continuos con los otros poderes del Estado, con un marco constitucional rígido que no prevé soluciones políticas a los enfrentamientos de poderes ni permite la iniciativa de reforma al Poder Ejecutivo.

Vamos a utilizar el “Modelo para Analizar los Conflictos Mundiales” presentados por Miguel Sang Ben y Alejandra Liriano . Por lo tanto, ofreceremos los lineamientos de análisis y las fuentes para continuar con la tarea investigativa.

PERCEPCIONES: Estudiar las percepciones de las tareas (la propaganda de que es un asunto hondureño no vale porque afecta la esencia misma de la Carta Democrática Interamericana), los temas (la crisis se trata de controlar pero las nuevas tecnologías están dándole una dinámica nueva a las manifestaciones) y los procesos (la polémica constitucional es sólo el telón de fondo, pero que en este caso muestra las falencias institucionales de la democracia hondureña).

 Es una tarea específicamente psicológica, por lo que podemos señalarlas como ideológicas.

ESTRUCTURAS: Escenarios físicos y humanos: Honduras es uno de los cuatro países más pobres de América Latina y el Caribe. Tiene una gran riqueza hídrica y mineralógica.

Dinámica histórica: Tiene una gran población indígena, con una oligarquía que no ha tenido que pactar ningún pacto social, por lo cual la presión social se ha incrementado en la forma de la criminalidad y la corrupción.

Mecanismos desencadenantes: la dinámica de la reelección como incentivo a la movilidad de las elites gobernantes y la presión de reformas y la intención de imitar la dinámica política de los regímenes izquierdistas latinoamericanos desencadenaron la crisis. El elemento desencadenante parece haber sido la destitución del Jefe de Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas.

ELEMENTOS: La contradicción entre las fuerzas internas y el ambiente internacional latinoamericano con la Carta Democrática Interamericana que no puede tolerar que ella permitió la reinstalación de Chávez y no pueda hacerlo con Zelaya. (Como comparación, la falta de este mecanismo es lo que no permite una actitud igual con Irán de los Ayatolas, pero necesitaría un análisis particular.)

DESARROLLOS: Con el resumen preparado por el Prof. Guillermo Pacheco y el seguimiento de las noticias podemos darle seguimiento a la superficie del problema, porque los movimientos detrás de “bambalinas” son diversas: el ALBA de Chávez, la OEA y el resto de América Latina y el Caribe, el Departamento de Estado. ¿Hasta qué punto podrá mantenerse el problema sin recurrir a la amenaza externa, como podría ser el sandinismo nica que ya asomó en la denuncia del usurpador Micheletti?

PROYECCIONES: La proyección es que si se entra en negociaciones deben reconocer que se va a ceder. El paso dado por la OEA de designar al Presidente Arias, de Costa Rica, como tal, lleva a pensar en los siguientes desenlaces a corto plazo:

1. Reinstalación de Zelaya con restricciones y compromisos de no buscar la reelección.

2.  Canalización de recursos para que la solución sea política en las elecciones. (Deberemos conocer las intenciones de voto y la posible radicalización de las masas por la experiencia golpista.)

3. Observar cómo afectarán a los organismos multinacionales centroamericanos cualquier solución a la crisis hondureña.

4. Fortalecimiento de la OEA o del ALBA, o de ambos.

5. Respuesta latinoamericana a un problema de la región, como ejemplo para las otras regiones del mundo.

 Como habrán notado, es un esquema muy rico que he reducido a algunos comentarios, pero ya podremos ver los análisis que con posterioridad se harán sobre el incidente, ya que –como afirmé en la Tertulia de la ADEESD del viernes 3 de Julio de 2009- la crisis hondureña es una extensión de la definición latinoamericana de “creer en los mesianismos y no en las instituciones”.

Espero que esta lección nos la aplicáramos los dominicanos.