Establecer rituales

Debido a los cambios que ha estado experimentando nuestra sociedad en las últimas décadas, lamentablemente se está corriendo el riesgo de perder esos maravillosos rituales familiares por el ritmo acelerado de la vida actual. Pero imagínense, si a nivel personal nos hace una falta inmensa reactivarnos cada cierto tiempo con esos rituales de descanso, relajación, o de belleza que hemos asumido para nuestra satisfacción interna, como no podría ser una vitamina para el alma, esos rituales familiares.
Los mejores recuerdos de la infancia de cualquier persona son rodeados de personas importantes, como la familia. Recuerdos de cumpleaños, excursiones, reuniones familiares…etc.
“Los rituales son patrones y hábitos familiares de los que las familias dependen para manejar su vida diaria; son actividades habituales con alto contenido simbólico, que permiten que los miembros del sistema familiar especialmente los niños y niñas tengan límites previsibles. La repetición de rutinas diarias les da la seguridad de saber lo que se espera en los procesos relacionales y potencia el desarrollo de un sentido de responsabilidad. Estas actividades están desarrolladas en torno a la hora de la comida, la hora de acostarse, las visitas de amigos o familiares y momentos de ocio, la hora para realizar sus deberes escolares, la hora de juego, etc.”.
Algunas veces estos rituales pueden confundirse con simples rutinas que la gran mayoría manejamos en casa, sin embargo, los rituales comunican simbólicamente la idea de que “esto es quienes somos como grupo o familia”, dándole significado de generación en generación, cosa que las rutinas no logran porque se relacionan más con el “tener que hacer”.
De manera que, es importante que todas las familias tengan actividades que disfruten juntos y que se conviertan en algo habitual, predecible e integral en sus vidas. Algunas pueden ser intereses serios, como asistir a funciones de la comunidad o servicios religiosos en familia, otras pueden ser para divertirse, como ir de pesca. La esencia de esto, es que hagan lo que les dé satisfacción y disfruten, que pueda ayudar a unir a la familia.
Algunas familias establecen un tiempo semanal para una reunión familiar. Cuando todos están presentes, se comentan los problemas de la familia, las relaciones, los planes y las experiencias, y todos desde el más pequeño hasta el mayor tienen la oportunidad de ser escuchados y participar.
Particularmente yo entiendo que los rituales al interior de la familia generan en sus miembros un objetivo común y una identidad propia. Investigaciones han probado que este tipo de conductas se transforman, además, en agentes protectores frente a situaciones de riesgo, de padres e hijos.
Por esta razón, es recomendable establecer rituales, y más aún en nuestra era digitalizada, ya que la televisión, la computadora, la tablet, los celulares y demás, quitan mucha intimidad a la vida familiar, por lo que los rituales vienen a ser una excelente herramienta que nos protegen contra el caos, reducen el estrés y tienen la característica de robustecer los lazos.