Las estaciones de expendio de gas licuado de petróleo (GLP) comenzaron a vender el carburante de manera normal ayer domingo en el Distrito Nacional y la provincia de Santo Domingo, tras una escasez de varios días.
Cientos de personas, abarrotaron ayer las estaciones de expendio en procura de gas propano para el hogar o para sus vehículos.
Muchas de las estaciones de GLP habían permanecido cerradas hasta la noche del sábado.
Chóferes del transporte público que utilizan GLP para movilizar sus vehículos se quejaron por esta situación, señalando que la paralización de las ventas afecta su trabajo.
Durante un recorrido por estaciones ubicadas en diferentes sectores del Distrito Nacional y la provincia de Santo Domingo se pudo observar que casi todas disponían de GLP y estaban abarrotadas de clientes.
En la estación Onegas, en la calle San Juan de la Maguana, en Cristo Rey, empleados dijeron que siempre contaron con el carburante, por lo que en ese lugar nunca se dejó de vender el producto.
Sin embargo, la estación Pueblo Gas, en la avenida Nicolás de Ovando, que hasta el sábado en la noche se mantuvo cerrada, abrió ayer sus puertas al público.
De igual modo, sucedió en la estación ubicada en la calle Moca, en Villas Agrícolas, que también estuvo cerrada el sábado, pero ayer vendía gas propano de manera normal.
Algunos conductores consultados creen que no existe una real escasez de gas licuado de petróleo, sino que los dueños de los negocios se ponen de acuerdo para no vender el producto.
Sin embargo, en Tropigas, en la calle Diagonal, en Villas Agrícolas, no tenían gas y no sabían cuándo tendrían disponible el carburante.
En Propagas, ubicada en la intersección de las avenidas Padre Castellanos y Josefa Brea, disponían del combustible.
A la estación acudió una gran cantidad de vehículos y personas a pie y en motocicletas para abastecerse.
La misma situación imperaba en la estación Credigas, en la avenida Venezuela.
No había gas licuado en la Tropigas, en la avenida Charles de Gaulle, pero sí había en Credigas en la Hermanas Mirabal, en Santo Domingo Norte.