Llegar a una estación de gasolina puede ser en estos momentos lo mismo que jugar un boleto de lotería: a causa de la racionalización en la distribución de los combustibles, el cliente nunca sabe cuándo va a ganar o perder.

Aunque en algunas bombas los dependientes afirmaron ayer nunca han tenido problema con el suministro, lo cierto es que había muchas otras a las que le faltaba algún carburante o, en caso de tenerlos todos, no tenían la cantidad que van a necesitar para que no se les agote.

El caso más extremo es el de la Isla de la Marcos Ruiz (antigua 20) esquina Marcos Adón, una bomba que tiene más de una semana cerrada por falta de combustibles. El letrero de los precios, incluso, marca todavía RD$92.40, un importe que data de la semana del 17 al 24 de enero pasado.

Otra estación que también estaba cerrada el día de ayer era la Texaco de la avenida Las Américas: «Texavista», que se quedó sin combustibles desde las cuatro de la tarde del sábado.

En la Isla de la Padre Castellanos (antigua 17) con 12 la situación no es tan patética. Sin embargo, las cosas tampoco pintan bien: el combustible que tenían sólo les alcanzaba para el día de ayer. «Ellos trajeron la gasolina hoy pero trajeron muy poca y de hoy no pasa. Nosotros estuvimos tres días sin gasolina y ahora es que lo traen. Con el gasoil pasa lo mismo porque es que aquí mandan a pedir 5 mil galones pero nos mandan sólo 2 mil. El gasoil también llegó hoy, hacía días que no había», sostuvo José Miguel de Jesús.

En la Texaco de la avenida San Martín con Rafael J. Castillo, no hay gasolina regular desde el sábado pasado. «Nada más tenemos la super, sin plomo; y el gasoil. Ayer al mediodía se acabó la regular y estamos esperando que llegue. Quizás mañana haya, aunque no se sabe porque ellos dicen que la van a mandar y dejan a uno esperando», dijo Andrés Peña.

Tras manifestar que tienen más problemas con el gasoil, Peña aseguró que las gasolinas no escapan de la crisis. «Aquí se piden 5 mil galones y sólo mandan 2, eso es muy poca gasolina».

En la Shell de la Gustavo Mejía Ricart con Doctor Defilló sólo tenían gasolina regular y gasoil: la premium se acabó porque sólo llegó un camión. «En la Refinería dijeron que sólo podían traer 4 mil galones de gasolina regular. Ayer fue peor: no había ni gasolina ni gasoil. El viernes vino mucha gente y acabó con todo lo que había», explicó Estanilao Matos.

En la Shell de la 27 de febrero casi esquina Privada estuvieron sin diesel y sin gasolina regular desde ayer en la tarde. Hoy, sin embargo, recibieron el diesel y la regular pero no tenían de la premium.

En la Shell de la Venezuela no tenían fórmula diesel, que es el gasoil del bueno, pero tenían de las dos gasolinas. En la Texaco de la Venezuela, por otro lado, se han quedado muchas veces sin gasoil, ayer fue el último día que les escaseó. En cuanto a la gasolina, se quedaron sin regular desde el lunes hasta el jueves de la semana pasada.

En la Shell de la Marcos Ruiz con Moca se quedaron sin gasoil del bueno hace tres días, mientras la gasolina se está por acabar y no la reciben desde hace cuatro días.

[b]LAS QUE NUNCA HAN TENIDO DIFICULTADES[/b]

En la Texaco de la San Martín con Tiradentes, donde arreglaban las máquinas para que acepte tres dígitos, afirmaron que en ningún momento han tenido problemas con los carburantes. Tampoco los tienen la Shell de la John F. Kennedy con Lope de Vega ni la que está en la Winston Churchill justo al salir del elevado.

Las Esso, por otro lado, parecen ser las más favorecidas: ninguna de las visitadas tiene dificultades. Ellas son la de la Luis F. Thomén con José Núñez de Cáceres, la de la avenida Gregorio Luperón y la de la avenida Venezuela, donde dijeron que «aquí nunca se acaba».

De la misma forma se expresó una de las empleadas de la gasolinera Nativa, que está ubicada en la prolongación de la avenida Venezuela.