ENRIQUILLO, Barahona.- Esta comunidad costera no cuenta con una adecuada edificación donde los habitantes reciban servicios de salud, contrario a esto la contaminación, el deterioro y la falta de medicamentos contribuyen a la desesperación de sus residentes, que demandan salud.
Una edificación que data de más de 16 años no soporta más reparación y su deterioro es progresivo, al punto de observarse el hundimiento de paredes; las grietas del techo permiten que llueva dentro cuando acampa fuera.
Hierros retorcidos y carcomidos por el óxido, destrucción de los implementos, como camas y sala de partost, ya en desuso.
No cuenta con sala de emergencias y el médico de servicio ofrece sus labores en un banco en la marquesina, o en el área de ambulancia; solo hay dos enfermeras.
Los alimentos son preparados en una inadecuada e improvisada cocina.
Los pacientes son referidos a otros pueblos.