El empresario Celso Marranzini volvió a la carga ayer sobre el sector eléctrico y sugirió al Estado retirarse de esta actividad. En su opinión, el rol estatal debe ser regular y facilitar.  Marranzini  abogó porque se  establezcan reglas claras para que el sector privado pueda hacer las inversiones que se requieren en el  sector eléctrico.

El empresario Celso Marranzini planteó ayer la necesidad de que el Estado salga del negocio eléctrico y pase a desempeñar un rol de  facilitador y regulador.

En tanto,  el presidente de la Cámara Americana de Comercio, Christopher Paniagua, consideró  que para resolver el problema de la electricidad es preciso enfrentar  retos de corto y mediano plazos como son crear el  clima de confianza necesario para atraer inversión dirigida a la generación, distribución y transmisión.

Pidió  poner fin al fraude eléctrico y la aplicación de tarifas que realmente reflejen los costos.

Tanto Marranzini como Paniagua, hicieron los señalamientos en un panel sobre la situación coyuntural del sector eléctrico, organizado por la Cámara Americana de Comercio en el que participaron, además, el vicepresidente ejecutivo  de la CDEEE,   Radhamés Segura  y el presidente de AES Dominicana, Marcos De  la Rosa.

 Marranzini  abogó porque se  establezcan reglas claras para que el sector privado pueda hacer las inversiones que se requieren en las diferentes áreas del sector eléctrico

El empresario  hizo varias propuestas para resolver el problema de la electricidad, entre las que se encuentran reducción de las pérdidas técnicas y no técnicas, penalización del fraude, sin importar el sector de donde venga y la disminución de gastos y de los  consejos de administración en las empresas eléctricas estatizadas.

Marranzini también hizo un llamado a la empresa Trust Company of The West (TCW) dueña del 50% de las acciones de Edeeste que suspenda el proceso de  demanda que tiene incoado contra el Estado dominicano para dar oportunidad a la comisión nombrada a buscar una solución fuera de los tribunales.

Propuso buscar financiamiento para poner al día la deuda con los generadores, descartar la compra de las plantas de carbón de 600 megavatios, revisión de los contratos y aplicar el financiamiento de Petrocaribe al subsidio eléctrico y mantener  las cuentas de generadores al día para garantizar la generación.

De su lado el presidente de la Cámara Americana de Comercio, dijo que  a pesar de que los esfuerzos permanecen en el tiempo sólo con leves variaciones, los problemas de niveles inmanejables del hurto de electricidad, debilidad institucional, excesiva dependencia del petróleo, déficit financiero permanente, acumulando una deuda intersectorial, tarifas a los usuarios finales por debajo de los costos reales del sector y una baja calidad en el servicio de distribución.

 Paniagua, citó entre los retos a enfrentar el fortalecimiento de las instituciones en sus roles y desempeño definidos por la normativa, creación de una consciencia de pago por parte de la ciudadanía y la focalización de forma efectiva de los  subsidios.

Pide cero tolerancia al robo eléctrico

El presidente de AES Dominicana, Marco De la Rosa, en una exposición titulada “Desafíos del sector eléctrico 2009” abogó por cero tolerancia contra el robo de electricidad y afirmó que el alto nivel de pérdidas de energía y el mantenimiento de tarifas congeladas son obstáculos para la inversión privada en el negocio eléctrico.

Expuso que el gran reto   es atraer estas inversiones en momentos en el que el sector eléctrico nacional presenta las siguientes características: altos niveles de pérdidas de energía (39%) y mantener subsidios por encima de planificación.

Explicó que el problema estructural del sector más agudo es sin duda el de las pérdidas de electricidad, las cuales alcanzan niveles de 39%.

Al comparar estos niveles con otros países emergentes latinoamericanos e incluso algunos  africanos,  Marco De la Rosa  señaló que el nivel de perdidas del país sólo es superado por Ecuador y Haití, notándose una diferencia muy grande con países de la región como El Salvador, Argentina y Brasil, donde AES tiene inversiones en empresas de distribución, en donde las perdidas de electricidad están cercanas al 12%.   “La pregunta obligada es: ¿por qué no hemos podido en República Dominicana superar este problema?”, cuestionó.