WASHINGTON, AFP. El Congreso de Estados Unidos aprobó finalmente hoy una ayuda excepcional de 60.200 millones de dólares para reconstruir las zonas costeras devastadas por el huracán Sandy a fines de octubre, tras tres meses de disputas presupuestales.  

El Senado votó, por 62 votos contra 36, un texto ya adoptado el 15 de enero por los diputados, que dispone unos 50.500 millones de dólares para labores de reconstrucción, que se agregan a los 9.700 millones ya aprobados este mismo mes.  

Varios legisladores republicanos se sumaron a los demócratas y desistieron de pedir contrapartidas a cambio de esta cuantiosa ayuda.   

Los gobiernos de los tres estados más afectados por Sandy (Nueva York, Nueva Jersey y Connecticut) saludaron la decisión del Congreso, que ahora debe ser promulgada por el presidente Barack Obama.   

En 2005, tras el huracán Katrina, que había sumido en el desastre a Nueva Orleans (Luisiana, sur), el Congreso había aprobado, apenas diez días después de los hechos, una ayuda de 60.000 millones de dólares.

Más de 100 personas murieron y decenas de miles de viviendas fueron destruidas durante el pasaje de Sandy el 29 de octubre pasado por la costa nororiental del país.  

El dinero será utilizado en los próximos diez años e irá a los damnificados y a las empresas más perjudicadas, pero el grueso será destinado a la reconstrucción de edificios, túneles, calles, puentes y rutas y a protegerlos de futuras inclemencias climáticas.