La madre y los dos hijos afectados durante la explosión de un tanque de gas licuado de petróleo, en San Cristóbal, el pasado 31 de diciembre, seguían estables en las unidades de quemados de los hospitales Luis Eduardo Luis Eduardo Aybar y Robert Reid Cabral, respectivamente.
A la señora Lucinda Valentín, de 34 años, se les han practicado varios implantes y ayer vecinos donaron sangre, pues sería intervenida en las próximas horas.
Audis Rivera, hermana de la iglesia de Valentín, expresó que ésta seguía ayer estable en la Unidad de Quemado del Aybar, adonde acudió junto a otros vecinos para donar sangre, ya que la paciente sería intervenida quirúrgicamente.
Valentín ha sido sometida a varios implantes en diferentes partes del cuerpo, ya que sufrió quemaduras en 50 por ciento del cuerpo, por lo que se encuentra en estado delicado.