POR PEDRO GERMOSEN
Los senadores perredeístas Ramón Alburquerque y Vicente Castillo, así como el vocero reformista en la Cámara de Diputados, Luis Emilio Reyes Ozuna, se opusieron ayer a que el conocimiento de la reforma fiscal sea pospuesto. Alburquerque, de Monte Plata; Castillo, de Peravia, y Reyes Ozuna, de Santo Domingo, fueron entrevistados separadamente sobre el tema.

Alburquerque dijo que el Partido Revolucionario Dominicano (PRD) sólo aprobó una línea de prudencia y de exigencia para que se afecte lo menos posible a los pobres, pero no la «congelación» del conocimiento del proyecto de reforma fiscal.

Precisó que el partido blanco procura que se incluya un aumento salarial del 30 por ciento que, sostuvo, para el sector público sólo implicaría unos RD$7,000 millones.

«Luego, hay que aprobarlo de una vez», sostuvo Alburquerque, quien afirmó que posponer la aprobación del proyecto indefinidamente no es inteligente.

«Sería también una falta de colaboración a un gobierno que recibió el 58 por ciento de los votos. Por lo tanto hay que aprobar la reforma para que nunca el gobierno se queje por falta de colaboración generosa, para que si luego fracasa, si no alcanza el éxito, no busque otros culpables», dijo Alburquerque.

El legislador de la oposición planteó además que es preciso que las autoridades informen sobre su política de endeudamiento de suerte que el país sepa qué destino darán a los recursos externos.

Alburquerque dijo que el gobierno tiene que informar también qué hará con los subsidios y realizar un planteamiento económico integral como, recordó, lo planteó el Fondo Monetario Internacional (FMI) y lo prometió el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) durante la campaña proselitista.

Por su lado, el senador Castillo manifestó que posponer el conocimiento del proyecto de reforma fiscal, que cursa en la Cámara de Diputados, «sería una insensatez.»

«Yo creo que la actitud de cualquier ciudadano sensato y consciente, hombre o mujer, de la ciudad o del campo, en la actual coyuntura económica, es respaldar esa pieza legislativa con los correctivos de rigor», dijo el representante de Peravia.

Sostuvo que la reforma fiscal constituye un paliativo para enfrentar la crisis económica, «por lo que debemos abocarnos a conocerla, ya que fue elaborada con el consenso de la mayoría de los sectores representativos de la sociedad.»

Castillo expresó que la coherencia impone que esa iniciativa sea aprobada ahora porque, de lo contrario, advirtió, se haría más mal que bien.

Al ofrecer su parecer, el diputado Reyes Ozuna dijo que los legisladores reformistas no harían causa común con el PRD para obstaculizar el proyecto de reforma fiscal.

Dijo que el Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) hará una oposición constructiva, por lo que apoyará las iniciativas legislativas que más convengan al interés del país.

Expresó que la Comisión Ejecutiva del PRSC instruyó a los legisladores reformistas a no oponerse al proyecto de reforma fiscal, sino a escuchar y discutir los planteamientos sobre el tema junto a los técnicos de la organización política.