Están paralizados la construcción, las labores agrícolas y el comercio Neiba

Están paralizados la construcción, las labores agrícolas y el comercio Neiba

NEIBA. La construcción, el comercio y la agropecuaria están prácticamente paralizados en este municipio, como consecuencia de las repatriaciones de cientos de haitianos, los cuales se dedicaban a estas labores,  tras los incidentes del lunes, en los que dos haitianos y un dominicano resultaron muertos.

Las compras y ventas  en el mercado de esta comunidad, al cual  acuden cientos de haitianos que vienen procedentes de Haití, Jimani, así como de los bateyes de esta zona y de Barahona,  se han reducido de manera considerable.

Los extranjeros, por tradición, venden ropa, calzados, artículos de cocina, perfumes, electrodomésticos, jabones y otras mercancías, al tiempo que adquieren de los dominicanos plátanos, guineos, habichuelas, guandules, arroz, pollo, aceite y otros productos.

En comparación con lo que ocurría  una semana antes de los trágicos incidentes, las ventas y compras en el  mercado de esta ciudad  han bajado en alrededor de un 50 por ciento, conforme a las quejas de los propios comerciantes.

En lo relativo a la agricultura, productores de uva, café, plátanos y demás rubros que se cosechan  en esta zona, desde ya se ven imposibilitados de obtener mano de obra para las labores de limpieza de los terrenos, poda, fumigación y recolección de los frutos.

Lo mismo puede decirse del área de la construcción, que requiere en gran medida los servicios de haitianos en obras públicas y edificaciones privadas, ya que es la mano de obra que utilizan los ingenieros y maestros constructores.

Neiba es el municipio cabecera de la provincia Bahoruco, ubicada a 219 kilómetros de Santo Domingo, capital de la República Dominicana.

Los incidentes de Neiba se originaron luego que que un supuesto haitiano asesinara a machetazos al dominicano Julio César Díaz para robarle su motocicleta en la sección Los Grajos.

Esta situación provocó la ira de muchos dominicanos, que se constituyeron en turba, persiguieron y  asesinaron a dos haitianos a machetazos y golpes contusos.

 Pese a esos incidentes, el cónsul haitiano para la región Suroeste declaró que el hecho no afectará las relaciones entre Haití y la República Dominicana, señalando que se trató de una acción de carácter delictiva.

Ayer, el ex cónsul de Haití en  la República Dominicana, Edwin Paraison, demandó las autoridades una investigación de estos hechos, para determinar los verdaderos responsables.

Señaló  que  no vasta con que las autoridades digan que lamentan el caso. 

Las claves

1.  Las ventas

Los extranjeros, por tradición, venden ropa, calzados, artículos de cocina, perfumes, electrodomésticos, jabones y otras mercancías, al tiempo que adquieren de los dominicanos plátanos, guineos, habichuelas, guandules, arroz, pollo, aceite y otros productos.

2.  La agricultura

En lo relativo a la agricultura, productores de uva, café, plátanos y demás rubros que se cosechan  en esta zona, desde ya se ven imposibilitados de obtener mano de obra para las labores de limpieza de los terrenos, poda, fumigación y recolección de los frutos.

 3.  La construcción

 Lo mismo puede decirse del área de la construcción, que requiere la mano de obra haitiana.

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