Consejo que se repite constantemente en las embarazadas pero, a pesar de que durante el embarazo aumentan las demandas de macro y micronutrimentos, cada caso es diferente y no debes comer por dos.
Las diferentes etapas de la vida tienen sus características. La del embarazo tiene mucha importancia ya que ocurren distintos procesos de adaptación metabólica y preparación para la vida extrauterina del nuevo ser. En el proceso desde la fecundación hasta el momento del parto se activa un programa de información genética, influido por la condición materna, donde existen factores genéticos y ambientales como la alimentación. Esta ejerce un papel central, que influye en los niveles hormonales materno-fetales y placentarios y otros como el estrés, hábitos tóxicos y las infecciones.
Se recomienda incrementar ligeramente el tamaño de las porciones y elevar la frecuencia de toma de las mismas de 5 ó 6 al día para evitar el volumen gástrico excesivo y el riesgo de acidez o vómitos. Esta medida también evitará una alta demanda de insulina. Se hace énfasis en la alimentación adecuada de la embarazada porque con ello disminuyen complicaciones maternas: sobrepeso, obesidad, diabetes, hipertensión, o durante el parto o en el feto.
Se deben evitar déficits nutricionales que también producen complicaciones como anemia y restricción intrauterina. No se aconsejan cambios bruscos en la alimentación materna, ingesta de alimentos que puedan ser extraños o no deseados por la futura madre. No es momento de ensayos para evitar intolerancias o alergias.
Se debe evitar el consumo de alcohol (ya que produce el Síndrome Alcohólico Fetal), limitar el café 2 tazas al día ya que se asocia a restricción del crecimiento intrauterino y evitar el consumo de mariscos, pescados crudos, frutas y vegetales no desinfectados ya que se relacionan a riesgo de intoxicación.
Una alimentación variada, adecuada y equilibrada lograría que cada comida aporte hidratos de carbono, proteínas, lípidos y micronutrimentos, asegurará complementaciones y sinergias de nutrimentos, mejorará la salud digestiva de la madre aportando componentes bioactivos imprescindibles.
Cada trimestre del embarazo tiene sus propios requerimientos, dependiendo de la condición nutricional de la madre previo al embarazo, por lo que visitar un nutricionista/nutriólogo durante esta etapa es muy importante. Esta columna es la sección educativa de la Sociedad Dominicana de Nutrición Clínica y Metabolismo. Escribe tus preguntas a: sodonuclim@gmail.com / @sodonuclim.