Con el mandato expreso de la votación más alta en la historia del país, con la mayoría obtenida en ambas cámaras legislativas y la voluntad política del Presidente, unido a su espíritu de consenso, están dadas las condiciones para que estos cuatro años marquen las imprescindibles reformas económicas, políticas y sociales que garanticen la estabilidad con crecimiento de los próximos años, la competitividad y la aspiración de convertir la República Dominicana en una sociedad de clase media.
En el principio de la década de los noventa, tras un grave choque petrolero y una crisis interna fruto de los déficit fiscales, el Dr. Balaguer emprendió las reformas tributaria, arancelaria y laboral, y gracias a ello se recuperó la estabilidad, el equilibrio de las cuentas fiscales permitió disminuir de forma importante la relación deuda/PIB y se garantizó la paz laboral; escenario que se reforzó en el primer gobierno del PLD del Dr. Leonel Fernández.
Tras la peor crisis financiera en la historia del país, el PLD retornó al poder en 2004 y se emprendió una profunda reforma financiera, que todavía sus normas y reglamentos siguen perfeccionándose en nuestros días, y gracias a ello contamos con un sistema con adecuado patrimonio, solvencia, liquidez y bajísima morosidad. También se aprobó la Reforma de la Administración Fiscal, un conjunto de leyes y herramientas que han permitido una mejor ejecución presupuestaria, mayor transparencia y que en esta administración del Lic. Danilo Medina se ha dado una mayor vigencia con la implementación de la cuenta única de tesorería y el perfeccionamiento del sistema de compras, entre otros.
Ahora tocan las grandes reformas con el Pacto Eléctrico que debe parir un sistema energético con tarifas en línea con los precios de los combustibles, reducción de las perdidas y garantía de que el crecimiento de la oferta impida un oligopolio privado de los generadores. Esa reforma permitirá aliviar las finanzas públicas y con un sistema eléctrico estable y con tarifas a precios de mercado va a contribuir a una mejoría de la competitividad del país.
El Pacto Fiscal deberá permitir una profunda reforma del sistema impositivo, con uno más equitativo, progresivo, que garantice una presión tributaria creciente, acompañado de una Ley de Responsabilidad Fiscal. Ese pacto deberá permitir cumplir con las metas de la Estrategia Nacional de Desarrollo y mejorar cada vez más la calidad del gasto. Pienso que con los cambios iniciales, producto de los decretos del viernes 24 de junio, el Presidente ha enviado un mensaje claro de las prioridades en materia recaudatoria, el sector salud y también el financiamiento a las exportaciones.
Pacto Eléctrico y Fiscal son fundamentales, pero no representan la totalidad de las reformas, queda pendiente continuar la discusión de la reforma del Código de Trabajo, que debe concluir con una reforma laboral en donde las empresas no sean víctimas de mafias de abogados y quede establecido el seguro de desempleo, para garantizar la seguridad de los trabajadores y eliminar el pasivo laboral de las empresas.
La liberalización de las rutas del transporte de pasajeros permitirá a los usuarios precios más competitivos, especialmente si el gobierno sigue invirtiendo en el Metro, las rutas alimentadoras y otras soluciones; mientras que la liberalización del transporte de cargas va a disminuir los costos de las empresas y mejorar la competitividad del país. Obviamente esta reforma tendrá la oposición de los privilegiados empresarios del trasporte que los votantes les cerraron el paso a detentar posiciones electivas de poder para seguir chantajeando a esta sociedad.
La principal reforma política será una efectiva ley de partidos, una ley de garantías electorales y la adaptación de la ley electoral a la Constitución de 2010.

El Presidente Danilo Medina tiene la gran oportunidad de impulsar esta última generación de reformas que permitirán dar al país pasos firmes para que nunca más haya retrocesos políticos, económicos y sociales. Estoy plenamente convencido de que así será para coronar la extraordinaria obra de gobierno de todas las administraciones del PLD.