Estima importante construcción de escuelas

Estima importante construcción de escuelas

POR ALEIDA PLASENCIA
El Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP) consideró que fomentar la construcción de escuelas, es un elemento imprescindible en un modelo de competitividad y abogó porque las nuevas obras al respecto se ubiquen en lugares apropiados para la tranquilidad que precisa la labor de aprendizaje.

«De ahí que las políticas públicas deben normar la vida en sociedad de acuerdo a un perfil productivo que sea consistente con el desarrollo balanceado de la ciudad y de acuerdo a sus metas de crecimiento», dijo la presidenta del CONEP, Elena Viyella de Paliza.

Expuso también que los recursos de que dispone hoy la ciudad de Santo Domingo son escasos y que su aplicación debe responder a un programa estratégico priorizado que enfatice en la satisfacción de las necesidades vitales de consumo, producción, inversión y empleo de su población.

«La fuerza de trabajo que labora en nuestras empresas necesita de transporte ágil y eficiente, ya que su puntualidad es básica para la competitividad de la empresa moderna y para el rendimiento promedio  de sus actividades productivas”, sostuvo.

Añadió que si  la ciudad cuenta con un plan estratégico para la comunidad de Santo Domingo, los recursos se aprovecharían de manera más eficiente y los complejos habitacionales y los centros de producción se localizarían en aquellas zonas, cuyo retorno en términos económicos y sociales, sean los más elevados.

Entiende que los proyectos deben volverse a evaluar en función de la relación costo-beneficio que arrojen a los munícipes de la ciudad de Santo Domingo y en función a los efectos dinámicos que generen su construcción y emplazamientos.

«En definitiva, favorecemos un plan estratégico de la ciudad de Santo Domingo que programe su crecimiento, que desarrolle una visión de largo plazo, que concilie su crecimiento físico con la preservación de su balance ecológico, que incorpore participativamente a sus ciudadanos en la construcción del Santo Domingo de los próximos cincuenta años y que cree las economías de escala necesarias a su desarrollo equilibrado», dijo.

Consideró que los agentes económicos en las ciudades modernas están llamados a producir cambios en su entorno, en una ciudadanía corporativa que contribuye no sólo al cambio del modelo de motivación de la comunidad, sino que irradia progreso y prosperidad entre los habitantes que sirve, que fomenta el desarrollo urbano y la propia cultura comunitaria.

«Producir con eficiencia y oportunidad es la meta de un agente económico moderno que necesita el acompañamiento de sus autoridades, cuya finalidad debe ser facilitar la infraestructura física, la seguridad y las fuentes de financiación para su expansión», dijo.

Viyella de Paliza entiende que un hábitat no prosperará sin electricidad competitiva, sin un ornato de calidad, sin redes viales apropiadas y diseñadas en un marco integral de desarrollo que facilite la operación de los sectores productivos, sin agua sana y suelos administrados adecuadamente, sin una burocracia capaz y eficiente que desempeñe su papel en función del desarrollo de la comunidad, sin políticas que preserven el medio ambiente, sin instituciones que garanticen la propiedad y la seguridad ciudadanas.

«Y más importante aún, sin un sistema de justicia que sea el garante del cumplimiento y aplicación efectiva de la ley que garantice el orden ciudadano y facilite la función pública y privada», señaló.

Los agentes económicos precisan -dijo- de políticas fiscales territoriales que lejos de ser un desincentivo a la producción, estimulen su expansión, sin cargas excesivas y sin tarifas y arbitrios que conspiren contra su crecimiento y principal función que es crear riqueza, trabajo productivo y contribuir con el erario público a la prosperidad del hábitat al que sirven.

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