Jesús en su tránsito hacia el Gólgota dijo una frase que  ilustra perfectamente la situación política actual cuando  dijo “Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen”. El perdón debe ser para quienes actúan por ignorancia,  por cumplir órdenes que la autoridad mal ejercida impone. Por el contrario, el hijo de Dios enseña, de manera clara, contundente e indubitable, que deben ser condenados quienes actúan, a conciencia, de manera indebida.

Jesús dijo que sólo hay dos mandamientos, el primero de esos mandamientos no lo discute nadie: amar a Dios sobre todas las cosas; el segundo explica en tan cortas y sabias palabras, el más voluminoso tomo sobre la conducta humana. El segundo mandamiento, dijo Jesús es “ama a tu prójimo como a ti”: Amar a Dios es fácil, basta con servirle y para servirle sólo hay que cumplir con unas reglas de conducta previa y claramente establecidas: no robar, no matar, no desear la mujer del prójimo, no levantar falsos testimonios ni mentir, no chismear, respetar a los demás; en una palabra: no le hagas a otro lo que no quieres que te hagan. Los entonces jóvenes miembros del Partido de la Liberación Dominicana que llegaron al poder en 1996, llegaron como “falsos Mesías y falsos profetas  y harán grandes señales y milagros para engañar, a ser posible hasta los que Dios mismo ha escogido”.

La ambición y la rapacidad los cegaron y olvidaron que “no se puede servir a Dios y al dinero”. Intentaron algo imposible: servir a dos amos, porque odiarás a uno y despreciarás al otro”.

¡Ay de ustedes¡ maestros de la ley y fariseos, hipócritas que limpian por fuera el vaso y el plato  por dentro está lleno de lo que hayan conseguido con el robo y la avaricia. Así son ustedes, por fuera parecen buenos ante la gente pero por dentro están llenos de hipocresía y de maldad”.

Dentro de la borrachera de la corrupción y el robo, intentan desconocer que “no hay nada secreto que no llegue a descubrirse ni nada escondido que no llegue a saberse”, dice la Biblia.

“Lo que les digo en la oscuridad díganlo ustedes en la luz del día y lo que les digo en secreto grítenlo desde las azoteas de las casas. No tengan miedo de los que pueden darles muerte pero no pueden disponer de su destino eterno, teman más bien al que puede darles muerte y también puede destruirlos par siempre en el infierno”.

El reino de la maldad tiene su tiempo. Vamos a desplazar a Leonel, Danilo, Margarita y la parte corrompida del PLD.

¡A votar el 20 de mayo por Hipólito Mejía!