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Las personas emocionalmente sanas tienen control sobre sus pensamientos, sentimientos y comportamientos. Se sienten bien consigo mismas y tienen buenas relaciones interpersonales. Pueden poner los problemas en perspectiva.
Además, son capaces de mantener una armonía entre lo que piensan, lo que sienten y lo que hacen.
¿Cómo mejorar nuestra salud emocional?
Ejercicios. Hacer alguna actividad física ayuda a pensar mejor. Piensa en cuál es el que más se ajusta a tus necesidades y ponte en marcha.
Medita o practica yoga. Ambas son actividades que te vendrán muy bien a la hora de mejorar tu salud mental.
Invertir sabiamente el tiempo. Si el problema que tienes es de tiempo, piensa bien en cómo lo estás invirtiendo para darte cuenta de cómo sacarle más provecho y ganar en cuanto a nivel de salud mental.
Descansa bien. Si no duermes las horas suficientes, tu salud mental se resentirá de forma importante, al igual que la física.
Comparte lo que te apasiona. Piensa en cuáles son tus actividades favoritas y, si es posible, puedes inscribirte en cursos o unirte a grupos que compartan el mismo hobby. Esto te permitirá crear sentimientos de pertenencia y conocer gente nueva.