Eduardo Estrella, proclamado ayer presidente del Partido Dominicanos por el Cambio (DxC), propuso a la nación dominicana enfrentar el narcotráfico y la corrupción con firmeza para que vayan a la cárcel los verdaderos responsables de la fuga de los hermanos Benítez, de Figueroa Agosto y Sobeida, y del caso Paya, “que al día de hoy, las autoridades no tocan, porque les faltan pantalones o, peor aun, porque sean cómplices”.

En otro orden, Estrella llamó a la comunidad internacional a ayudar de manera inmediata y prolongada a Haití, un país sin instituciones y con el derrumbe físico de su capital, tras el terremoto del pasado martes. 

El presidente del partido DxC habló durante la asamblea de delegados que contó con la presencia de inspectores de la Junta Central Electoral (JCE) y la aprobación del quórum por un notario público del 87% de la matrícula presente.

La asamblea, celebrada en el hotel Dominican Fiesta, también  aprobó los estatutos del partido, el Consejo de dirección máxima, el Consejo Ejecutivo Nacional y cuatro resoluciones.

En un vistoso acto y con su eslogan “Sí se puede”, Estrella dijo que es posible transformar el país.

Manifestó que en Haití hubo un terremoto que mató a miles de personas y destruyó las estructuras de su capital, pero que en República Dominicana hay una catástrofe moral que aceleradamente debilita y socava los cimientos de las instituciones públicas.

Su nuevo partido

Dijo que el de  ayer, fecha del surgimiento de Dominicanos por el Cambio, fue un mal día para “los señores políticos y funcionarios corruptos, señores ladrones, señores narcotraficantes, señores que se benefician y lucran del sudor de la gente, señores malos policías y militares que deshonran nuestros cuerpos armados, señores y señoras del lado oscuro de la República”

Afirmó que  Dominicanos por el Cambio es una esperanza para todos los ciudadanos que creen que otro país es posible y están dispuestos a aunar voluntades para conseguirlo. “Nuestros gobernantes se esfuerzan día a día por tronchar  nuestro destino, por eso para afrontar este desafío, hay que comenzar por el principio: erradicar el Gobierno de los “más amigos” y reemplazarlo por el Gobierno de los más capaces. Y terminar de una vez y por todas con este país de las vacas flacas y los políticos gordos”.

Propuso encarar y hacer realidad los  seis grandes cambios importantes que necesita el país.

Dijo que se necesita gente  que quiera y se comprometa a hacer un cambio social, en el sistema educativo, en el sistema de salud, cambios en la justicia, cambio en el modelo productivo y un gran cambio en los valores, una verdadera revolución social y transformación moral, que   permita pasar  a una sociedad más justa, más equitativa y más acogedora”.