NEW YORK, (AP).- Con Emanuel Ginóbili nuevamente como figura estelar, los San Antonio Spurs demoraron poco para recobrar el título de la NBA a costa de los campeones Detroit Pistons, en un 2005 en el que Brasil y Grecia pusieron la nota alta en las Américas y Europa a un año del mundial de Japón.

Esta vez, el libreto en la liga estadounidense no sufrió cambios y a la final del campeonato 2004-05 arribaron los monarcas de las dos últimas temporadas, con un San Antonio que estuvo mejor sintonizado colectivamente gracias a las proezas de Tim Duncan y Manu Ginóbili.

El aporte de Duncan y Ginóbili fue tal que al final del séptimo partido costó seleccionar entre ambos al jugador más valioso, honor que recayó finalmente en el estelar delantero estadounidense.

La actuación del alero argentino y sus 21.8 puntos por juego en los playoffs fue pieza fundamental para que San Antonio regresara a la cúspide de la NBA, luego de que en la temporada 2003-04 abdicara el título al perder ante Los Angeles Lakers en la segunda ronda de los playoffs.

Otros equipos como los Miami Heat y los Phoenix Suns dieron espectáculo y atacaron sin cesar, pero terminaron viendo la final por televisión. Miami se vio afectado por la ausencia por lesión del estelar Dwayne Wade en el séptimo juego de la final de la Conferencia del Este contra Detroit.

Los Spurs emergen nuevamente como los grandes favoritos para repetir en el 2005-06, para cuya empresa se armaron este año con varias figuras de fuste: el escolta Michael Finley y el armador Nick Van Exel, que llegaron nada menos que como suplentes de Tony Parker y Ginóbili, respectivamente.

San Antonio también contrató al delantero argentino Fabricio Oberto, quien procede del básquetbol de España y compañero de Ginóbili en el seleccionado albiceleste que ganó el oro en Atenas en el 2004.

Durante el 2005 y previo al inicio de la nueva temporada, se dieron movidas importantes de técnicos en la NBA, entre las más resonantes fue el regreso de Phil Jackson al banquillo de los Lakers, después de que el equipo de Los Angeles se quedara fuera de los playoffs por primera vez en una década.

Allí se reencontró con Kobe Bryant, con quien se habría reconciliado tras una serie de controversias en la temporada 2003-04, en que el astro de los Lakers estuvo atormentado debido a un proceso por supuesta violación sexual a una mujer, del que salió librado.

Por su parte, Larry Brown se divorció de los Pistons y pasó al equipo que anhelaba dirigir: los Knicks de Nueva York.

Mientras tanto, el Heat le llevó nuevos compañeros a Shaquille O’Neal y a Wade con la contratación de Gary Payton, Antoine Walker y Jason Williams, que colocaron al de Miami uno de los más equilibrados y candidato para ganar la Conferencia del Este.

Durante el 2005, la NBA también pudo lograr finalmente la renovación del acuerdo colectivo, lo que alejó cualquier posibilidad de un conflicto con los jugadores.

Sin embargo, la entrada en vigor de un reglamento que obliga a los jugadores a vestir con sobriedad, sin exhibir pendientes y camisetas sin mangas, no cayó bien entre algunos estelares.

Fuera de las arenas de la NBA y en torneos a nivel de selecciones, Brasil se impuso en el premundial de las Américas celebrado en República Dominicana y que era clasificatorio al mundial japonés del 2006, mientras que Grecia se coronó campeón en el Eurobasquet al vencer en la final a Alemania.

Los brasileños aprovecharon que los argentinos, subcampeones mundiales y actuales monarcas olímpicos, llevaron a un equipo de suplentes al torneo, ya que estaban con el pasaje asegurado a Japón. En ese premundial también se clasificaron Estados Unidos, Venezuela y Panamá. Puerto Rico se metió en el viaje después de haber sido invitado por la FIBA.

La grata sorpresa la dio Panamá, que regresó a los primeros planos del básquetbol regional después de una larga ausencia. Como premio, el país canalero logró la sede del Centrobásquet del 2006.

En Japón las cosas serán muy distintas, ya que la chapa de favoritos la llevarán Estados Unidos, que irá armado con astros de la NBA, Argentina y Grecia, para mencionar sólo una entre un grupo de potencias europeas.

Argentina quedó en el 2002 a un paso de alcanzar la gloria en el mundial de Indianápolis, al caer en la final ante Yugoslavia.

En ese campeonato, los albicelestes derrotaron a los estadounidenses, con lo que pusieron fin al largo invicto de equipos de ese país integrados por figuras de la NBA. Con un Ginóbili que lo gana todo, Argentina puede cristalizar lo que no pudo en el 2002.