CHICAGO. AP. Los llaman superenvejecientes, hombres y mujeres octogenarios y nonagenarios con cerebro y memoria aparentemente mucho más juveniles.
Los expertos están estudiando este grupo inusual con la esperanza de poder encontrar los medios para ayudar a otros a precaverse de la pérdida de memoria. Y hasta ahora han extraído algunas conclusiones sorprendentes: las pruebas de escaneo han hallado en ellos una cantidad notablemente escasa de las plaquetas características de la vejez y una mayor masa cerebral en los centros de atención y memoria.
Vivimos más tiempo pero no necesariamente mejor en nuestros años postreros y por eso esperamos que el estudio de los superenvejecientes encuentre factores modificables que podamos usar para ayudar a la gente a vivir más y mejor, dijo la autora central del estudio Emily Rogalski, del centro de neurología cognitiva y enfermedad de Alzheimer en la Universidad Northwestern en Chicago.
El estudio sigue buscando voluntarios, pero hasta ahora menos del 10 % de los interesados han sido elegidos.
Hemos revisado a más de 400 personas y solo unos 35 han reunido los requisitos para este estudio, de modo que verdaderamente representa un porcentaje bajo de población, afirmó Rogalski.