CHICAGO, EE. UU. (EFE). El uso de suplementos de vitamina E no ayuda a reducir el riesgo de las enfermedades del corazón y, por el contrario, podría perjudicar a los pacientes que necesitan un tratamiento riguroso, según un estudio publicado.

El informe, publicado en la revista médica Archives of Internal Medicine, hace un resumen de siete estudios realizados desde 1990 sobre el uso de este tipo de antioxidante.

El análisis contradice anteriores estudios sobre las propiedades del consumo de antioxidantes como las vitaminas E y C, y el “betacaroteno” (un tipo de vitamina A) para reducir el riesgo de las enfermedades cardiovasculares.

Según la Asociación Estadounidense del Corazón, hasta un 30% de los estadounidenses toma algún tipo de antioxidante para complementar su dieta.

El estudio publicado en la revista, auspiciado por el Instituto de Investigación Agatston en Miami Beach (Florida), advierte de que el consumo de píldoras de vitamina E no se traduce a una mayor protección contra las enfermedades cardíacas.

La autora del informe, Rachel Eidelman, explicó que la vitamina E, obtenida de forma natural mediante el consumo de alimentos, juega un papel importante porque combate el colesterol “malo” que bloquea las arterias.

Pero señaló que el uso de suplementos dietéticos no parece aportar el mismo beneficio, y advirtió de que los pacientes que padecen del corazón necesitan acatar el consejo médico de tomar sus debidos medicamentos y adoptar mejores hábitos alimenticios. La Asociación Estadounidense del Corazón no recomienda el uso de suplementos dietéticos y destaca la necesidad de realizar más investigaciones definitivas sobre sus posibles usos. El Instituto, dirigido por el doctor Arthur Agatston, recibe fondos de la empresa de alimentos Kraft para algunas de sus investigaciones.