Entre los objetivos principales, estará lograr acceso al mercado europeo para el etanol brasileño, producido a partir de la caña de azúcar. Los productores brasileños son los más eficientes del mundo y el etanol brasileño se produce con una fracción del costo del europeo, en gran parte alemán, y producido a partir de la remolacha o el trigo. Brasil también lidera el mundo en la tecnología “flex fuel” y 70% de los vehículos que se venden en Brasil hoy pueden funcionar con gasolina, etanol, o una mezcla de ambos.

El etanol europeo subsidiado es demasiado costoso para que esta tecnología tenga un atractivo amplio, pero los organizadores del evento piensan que ellos tienen la respuesta: mezclar el etanol europeo con el brasileño, en lo que dicen sería un negocio en el que todos salen ganando. Los productores de ambas costas del Atlántico ganarían un nuevo mercado, y los consumidores tendrían acceso a un combustible verde, a su alcance, para mezclar con gasolina o utilizarlo puro. Los partidarios dicen que la idea no caerá mal en la política agrícola de la UE. Pero todavía hay que poner a prueba la reacción de Bruselas.

VERSION: IVAN PEREZ CARRION