POR ALEIDA PLASENCIA
La empresa Ethical Pharmaceutical, que surgió de la  idea de que  el futuro del negocio de medicamentos radicaría “en diseñar productos propios” y no depender de fármacos importados,   introduce 18 nuevos fármacos   de fabricación nacional todos los años.

Creada hace 35 años  por Luis A. Lebrón, basada en la filosofía  de ofrecer productos de alta calidad a precios razonables, Ethical  ha captado  el 10 por ciento del mercado nacional  de medicamentos.

Tiene un departamento de desarrollo de productos en el que crea las fórmulas que utiliza.

Antecedentes

En 1962,   Lebrón, con solo 19 años de edad y un capital de RD$5,000, fundó junto a su cuñado, Manuel Valentín Ramos   la  empresa Leterago,  dedicada a la importación, representación  y distribución de medicamentos.

 Pese a que Leterago fue una empresa exitosa, con el paso de los años, Luis  Lebrón se convenció de que  el futuro del negocio de medicamentos estaría en el diseño de productos, más que  en la dependencia de representaciones de firmas extranjeras.

El 12 de febrero de  1972, en los Jardines del Norte,  Lebrón fundó   Ethical Pharmaceutical, que en sus inicios  producía  jabón  medicinal y un jarabe para levantar la defensa: Jabón B-33 y Adek Solución.

Líder

En 1973, Lebrón  se dedica exclusivamente a la producción  de medicamentos, vende la empresa Leterago e induce a  Ethical Pharmaceutical a un proceso de desarrollo que la convierte en  una de las  empresas líderes en su ramo.

Mantiene este privilegio desde hace   más de una década. Fabrica en la actualidad  unos 200 productos en  700 presentaciones. Sus líneas abarcan sólidos, líquidos y semi líquidos.

 Según José A. Durán, gerente general de Ethical, entrevistado en compañía del licenciado Hochi Vega, ejecutivo de la empresa, el éxito de ésta se fundamenta en su filosofía de producir medicamentos de alta calidad y a precios razonables.

Compromiso

“En Ethical tenemos el firme compromiso de ofrecer medicamentos confiables al alcance de todos, para contribuir con el progreso y el bienestar de nuestra sociedad”, sostiene Durán. Ethical vela  siempre por el cuidado y el desarrollo de sus recursos humanos y naturales, e introduce la tecnología más avanzada de ramo farmacéutico, refiere.

Desde 1999, Ethical opera en la  Avenida 27 de Febrero 1501, en residencial Alameda.  Ha instalado “la máxima tecnología en la infraestructura”, con lo que  se convierte -dice- en una empresa de vanguardia en esta materia.

Ethical, que opera con unos 400 empleados, se ha concentrado solo en el mercado local, creando un vínculo de confianza respecto a sus productos en   la clase médica y los Consumidores.

 En cuanto al futuro, Ethical proyecta continuar siendo líder del mercado farmacéutico nacional e incursionar en el mercado de exportación.

Según Durán, la empresa aplica un  estricto sistema de aseguramiento de calidad.

Se basa en una estrategia  de calidad y productividad, en el marco de un plan de mejoramiento continuo, con énfasis en la variación de los procesos para cumplir constantemente con las especificaciones.

De esta forma, garantiza un incremento de los factores de productividad, sostiene.

Fortalezas de Ethical

 Comprometida con la calidad para satisfacer las necesidades y expectativas de los clientes.

 Trabaja en equipo y pone énfasis en el mejoramiento permanente de sus acciones, incluidas las relaciones con los empleados, clientes y proveedores.

Un personal técnico altamente calificado y experimentado en el desarrollo de medicamentos, que elabora las fórmulas y las especificaciones de las materias primas y de los materiales de acondicionamiento.

 Su personal técnico realiza las pruebas piloto y validaciones de productos con avanzada tecnología, lo que  garantiza la consistencia en la manufactura a gran escala.

Dispone de “máxima tecnología en manufactura. Es una empresa de vanguardia en cuanto a la aplicación de tecnología en la manufactura.

Visión de continuar siendo líder en el mercado.