Poco a poco, como quien calcula, el lago Enriquillo se adueñó de un terreno que los viejos de la comunidad afirman le ha pertenecido siempre. En ese apoderarse de lo suyo, arrasó con casas, ganado y cosechas de los humildes moradores. De esos afectados, 537 familias serán reubicadas en el proyecto habitacional que construyó el Gobierno en esta empobrecida comunidad. Es un rayo de luz entre tanta humedad literal y espiritual.
El proyecto está a siete kilómetros del poblado anterior y alejado del lago Enriquillo para evitar nuevas inundaciones. Ayer, en un recorrido con reporteros, el ministro de Defensa, almirante Sigfrido Pared Pérez, explicó que la obra está a cargo de las Fuerzas Armadas y es el primer modelo para una sociedad de cultura del verde, porque toma en cuenta criterios medioambientales.
Señaló que arquitectos, ingenieros, albañiles militares y soldados están inmersos en la obra. “Para nosotros es importante pasar está prueba, completarla y así tener todo este equipo de hombres en trabajo para en el futuro, cuando se considere construir un proyecto parecido, ya se tiene la práctica”, dijo. Acompañaron a Pared Pérez, el jefe de la Armada de la República Dominicana, vicealmirante Edwin Dominici y los mayores generales Rubén Darío Paulino Sem y Ramón Hernández Hernández.