PEKIN (AFP).- La secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, amenazó a Corea del Norte con posibles sanciones ante la ONU si no resuelve la crisis nuclear y acusó a China de haber hecho subir la tensión con Taiwán, al poner fin el lunes en Pekín a una gira asiática.

   Tras mantener reuniones con los dirigentes chinos, la jefa de la diplomacia estadounidense consideró que «el levantamiento de un embargo (europeo) sobre armas en este momento no sería el mensaje correcto» que conviene transmitir al gobierno chino.

   En este sentido, calificó de «comentario realista» las declaraciones del ministro de Relaciones Exteriores británico Jack Straw, quien el domingo dijo que el recurso a la fuerza previsto en la ley antisecesión china en caso de que Taiwán haga una declaración de independencia complica el proceso de decisión europeo para el levantamiento del embargo.

   «La ley antisecesión aumentó las tensiones», afirmó durante una conferencia de prensa Rice, quien espera que Pekín tome «medidas que muestren una voluntad de reducir tensiones» con Taiwán.

   Pero sobre todo insistió en que Washington quiere solucionar la crisis nuclear norcoreana, en momentos en que Pyongyang viene multiplicando las declaraciones belicosas.

   Si el régimen de Kim Jong-il se niega a negociar «entonces, por supuesto, tendremos que considerar otras opciones», declaró Rice haciendo alusión a la posibilidad de pedir sanciones contra Pyongyang en el Consejo de seguridad de Naciones Unidas.

   «Todo el mundo es consciente de que existen otras opciones en el sistema internacional», agregó, y advirtió al régimen norcoreano que tendrá «problemas» si continúa rechazando la negociación.

   Las negociaciones multilaterales son por ahora «el único medio para que se haga realidad una península coreana sin armas nucleares», insistió Rice.

   China quiere una reanudación de las negociaciones multilaterales entre su país y las dos Coreas, Japón, Rusia y Estados Unidos para poner fin a la crisis surgida en el 2002, cuando el régimen norcoreano decidió retomar su programa nuclear.

   Aún así, Rice declaró que Estados Unidos «no tiene intención de atacar» a Corea del Norte.

   En febrero, Pyongyang afirmó haberse dotado de la bomba atómica y rechazó de plano las negociaciones, mientras Washington no abandone su política «hostil».

   En cuanto a los derechos humanos en Pekín, Rice, que transmitió una invitación del presidente estadounidense George W. Bush a su homólogo chino Hu Jintao para que visite Estados Unidos, fue muy prudente e incluso mencionó «algunos progresos durante los últimos meses».

   No obstante, el sábado, en Tokio, la secretaria de Estado exigió una mayor democratización en China e hizo hincapié sobre todo en el tema de la libertad de culto.

   Antes de regresar a Washington, Rice, patinadora de alto nivel, mantuvo un encuentro con el equipo chino de patinaje artístico en la categoría júnior.

   Su gira de una semana por Asia la llevó a India, Afganistán, Pakistán, Japón, Corea del Sur y China.