TORONTO. Canadá. AFP.

El anfitrión Canadá promete dar lucha sin cuartel en Toronto-2015 para el casi imposible sueño de superar a Estados Unidos, líder histórico de los Panamericanos, mientras Cuba defenderá a capa y espada su título de segunda potencia continental, amenazada por un Brasil en alza.

A lejana distancia, Estados Unidos mira a todos por encima del hombro con sus 1,861 oros en la historia de los juegos continentales, enfocado en esta edición en arrasar en 10 de las 16 disciplinas clasificatorias para Rio-2016. El Tio Sam se presenta con una delegación de buen nivel de 623 atletas que competirá en 34 de los 36 deportes programados y con figuras de alcance mundial como la esgrimista Mariel Zagunis, campeona del sable en los últimos dos Juegos Olímpicos, tres veces monarca mundial y dos veces panamericana, así como la tiradora Kimberley Rhodes (oro en Atlanta-96).

El trío de estrellas de Estados Unidos lo completa el taekwondista Steven López, hijo de nicaragüenses de 36 años, que atesora un impresionante palmarés de cinco campeonatos mundiales y tres medallas.

Canadá: el sueño casi imposible

Contra ese poderío Canadá quiere ser profeta en su tierra. Una tarea nada sencilla, pero no imposible: en las dos ocasiones que Estados Unidos fue segundo, sus verdugos fueron los anfitriones: los cubanos en La Habana-1991 y los argentinos en Buenos Aires-1951, en la primera edición del certamen americano.

El alto presupuesto, la necesidad de mostrar en casa una misión deportiva competitiva y el apoyo del público son los condimentos para que habitualmente los locales mejoren ostensiblemente sus rendimientos.

La meta de mínima de los canadienses es superar las 64 preseas de oro logradas en su anterior condición de local, en Winnipeg-99, aunque esa cifra ni de lejos le alcanzaría para el premio mayor de desbancar a Estados Unidos, que en Guadalajara-2011 sumó 92 medallas doradas. Medalla de plata en Londres-2012 y con seis preseas en los mundiales de natación, Ryan Cochrane es la punta de lanza de los canadienses para comenzar a hacer realidad el sueño del anfitrión, que competirá en los 36 deportes de la cita continental.

Cuba, con todo

Cuba va a Toronto apoyada en la increíble historia de un país con solo 11 millones de habitantes que ha sido segunda en los Panamericanos desde Cali-1971 y solo salió de esa posición para arrebatarle el trono a Estados Unidos en la isla en 1991. Toronto-2015 será «muy fuerte» para los cubanos, pues enfrentarán a «dos potencias» que han luchado «históricamente» por el segundo lugar, Canadá y Brasil, dijo el presidente del Instituto de Deportes de Cuba, Antonio Becali.

Los antillanos han ganado 839 medallas de oro en total en los Juegos y le llevan una enorme diferencia a Canadá, el tercero en el palmarés histórico, que acumula 377. Cuba ha puesto toda la carne en el asador integrando una misión de 459 atletas incluidos todos sus campeones como para plantar bandera ante sus rivales directos, Canadá y Brasil. El boxeo, judo, atletismo, lucha, taekwondo, tiro, remo y ciclismo deben aportar el mayor botín dorado para Cuba.

Para la cosecha de oro, presentará a los campeones olímpicos Mijaín López (lucha), Idalis Ortiz (judo), Roniel Iglesias (boxeo) y Leuris Pupo (tiro), así como Pedro Pablo Pichardo (triple salto), la ciclista Marlies Mejías, el taekwondista Rafael Alba y el remero Angel Fournier.

Brasil, desde el agua

Brasil, el cuarto en discordia en el escenario continental, prepara toda su artillería apuntando en dar un golpe en los Juegos de Rio-2016, y Toronto-2015 es el escenario ideal que habilite a los anfitriones a soñar con tomar el cielo por asalto el año próximo.

El gigante sudamericano ya mostró sus garras en Guadalajara-2011 desplazando a Argentina del cuarto lugar histórico y en Toronto apunta a ocupar un puesto en el podio con rivales de fuste como Canadá y Cuba. Desde el agua Brasil quiere empaparse de metales luego de liderar el medallero del Mundial de Piscina Corta de Doha en diciembre, con Felipe França a la cabeza con cinco oros o por Etiene Medeiros, campeona y recordista mundial en la misma cita.

México se fijó una meta de 23 oros, mucho menos que los 42 que consiguió como anfitrión en Guadalajara-2011, aunque igualaría la mejor marca fuera de su territorio, que registró en Mar del Plata-1995.

Argentina, en franco retroceso luchará por el sexto lugar contra Colombia, que está en alza con deportistas de elite como Ibargüen.