EU intenta estrangular Cuba; agresión provocaría éxodo

EU intenta estrangular Cuba; agresión provocaría éxodo

LA HABANA (EFE).- El presidente cubano, Fidel Castro, acusó hoy a EEUU de intentar «estrangular» a la isla, y advirtió de que cualquier intento de agresión podría provocar un «éxodo masivo» y estaría condenado al fracaso porque «las órdenes están dadas».

Castro encabezó en La Habana una concentración multitudinaria -200.000 personas, según los organizadores- frente a la Sección de Intereses de EEUU, en protesta por las medidas que entrarán en vigor el próximo día 30 y que endurecen el embargo estadounidense contra la isla.

En su «Segunda Epístola» al presidente estadounidense, George W. Bush, acusó a EEUU de intentar «estrangular la economía» del país.

El dirigente cubano ya dirigió a Bush su discurso del pasado 14 de mayo, cuando encabezó una marcha a la que acudieron más de un millón de personas en respuesta al anuncio de las nuevas medidas de la Casa Blanca.

Ayer, además, volvió a culpar al presidente estadounidense de tratar de «imponer por la fuerza» una transición en Cuba siguiendo una política «descabellada y torpe» contra la isla.

«Como esto sólo puede hacerse enviando tropas a ocupar puntos clave en el país, se está proclamando el propósito de intervenir militarmente en nuestra patria», dijo.

«Le sugiero a usted (Bush) y sus asesores que no intenten venganzas viles contra nuestra pueblo, no intenten aventuras locas como operaciones quirúrgicas o guerras de desgaste con el empleo de técnicas sofisticadas porque los acontecimientos se les pueden escapar de las manos», advirtió.

«Podrían destrozar el acuerdo migratorio, podrían provocar éxodos masivos que no estaríamos en condiciones de impedir, podrían provocar una guerra total entre jóvenes soldados norteamericanos y el pueblo de Cuba», afirmó.

Cuba y EEUU firmaron unos acuerdos migratorios en 1994 que, según Castro, se han cumplido «en lo esencial» en cuanto el número de visas concedidas, pero no en cuanto a la obligación de «evitar todo aliento a la emigración ilegal».

«Puedo asegurarle que usted jamás ganaría esa guerra», insistió el líder cubano, que recordó que la isla cuenta con «armas suficientes» y con «más de 200.000 oficiales y jefes bien preparados».

Advirtió también de que, en caso de una invasión, su ausencia «por causas naturales o de otra índole» no mermaría la capacidad de lucha del país.

«Ustedes no podrán disponer de un día, una hora, un minuto, ni un segundo para impedir que la conducción política y militar del país sea asumida de inmediato. Las órdenes de lo que debe hacerse están dadas de antemano», aseguró.

Castro calificó de «infamias» la inclusión de Cuba en la lista de países que promueven la prostitución y el endurecimiento del embargo.

Pronosticó también que Bush puede perder la Presidencia por su «fanática creencia de que su reelección en noviembre depende del apoyo de una mafia conocidamente terrorista», en alusión a los grupos anticastristas de Miami.

«La dependencia suya de esos grupos terminará restándole muchos votos», pronosticó Castro, arropado por decenas de miles de habaneros que agitaban banderitas cubanas y vestían camisetas rojas, junto a un edificio del que colgaba una pancarta gigantesca que mostraba a Bush con bigote hitleriano sobre la frase «Bush, fascista».

«Prohibir a los cubanos residentes (en EEUU) visitar a su familiares(…) es de una crueldad incalificable (…) no pocos cubano-americanos están pensando ya en promover un voto de castigo», agregó.

La Casa Blanca anunció la pasada semana que a partir del 30 de junio los emigrados cubanos sólo podrán visitar a sus familiares cercanos en Cuba una vez cada tres años, por un máximo de 14 días.

Las medidas restringen además los gastos durante sus visitas a la isla a 50 dólares diarios, frente a los poco más de 160 dólares permitidos antes, y aunque mantiene la cifra de 100 dólares mensuales para las remesas, únicamente podrán beneficiar a familiares de primer grado que no militen en el Partido Comunista.

Cuba y EEUU rompieron relaciones tras el triunfo de la revolución liderada por Castro, pero desde 1977 mantienen abiertas Oficinas de Intereses en ambas capitales.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas