Nueva York. La Casa Blanca evalúa la posibilidad de proteger de la deportación a indocumentados en Estados Unidos que estén casados con un estadounidense y a la vez otorgarles permisos de trabajo, lo que supone un alivio para más de un millón de inmigrantes, establecidos en los diferentes estados, entre ellos miles de dominicanos.
Las autoridades analizan la legalidad de otorgar a los indocumentados un amparo conocido en inglés como «parole in place», que permite a los inmigrantes trabajar legalmente y los protege de la deportación.
No obstante, la Administración del presidente Joe Biden no ha tomado todavía una decisión sobre el caso, se informó.
La semana pasada, el mandatario usó su poder para emitir una orden ejecutiva que las personas que crucen la frontera de manera irregular no puedan pedir asilo.
Por su parte, el alcalde de NY, Eric Adams, ha dicho que en la Gran Manzana han llegado en los últimos dos años cerca de 200 mil inmigrantes que han cruzado la frontera en busca de asilo y la ciudad se mantiene saturada.
De ese total, más de 65.000 aún están en el sistema de albergues públicos, estadía que la administración Adams tiene ahora limitada a 30 días para solteros y 60 para familias con niños.
Las autoridades panameñas anunciaron la semana pasada que de enero a mayo han transitado por la selva del Darién, frontera entre Panamá y Colombia, 170.014 migrante camino hacia USA.
113.244 (68%) son venezolanos; en segundo lugar, Ecuador con 12.300 (7%) y tercer lugar de Colombia con 11.219 (6,4%).
También ingresaron 10.348 chinos (5,9%) y 9.980 (5,7%) de Haití. El resto son de diversas nacionalidades, incluyendo de la RD, India y Cuba, entre otros países.
La proyección del gobierno panameño es que al concluir el año la migración por la selva del Darién esté al menos un 20% por encima de los 500 mil ingresos registrados en 2023.