WASHINGTON.  Los europeos deberían estar agradecidos por las operaciones de espionaje de Estados Unidos porque los mantienen a salvo, afirmó ayer un legislador estadounidense, instando a sus aliados a mejorar sus propios servicios de inteligencia. El presidente del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, el republicano Mike Rogers, calificó de «poco sinceras» las muestras de indignación por las escuchas telefónicas masivas de la NSA, la Agencia de Seguridad Nacional estadounidense.

En una entrevista ante la cadena CNN Rogers culpó a la prensa de haber exagerado la noticia. «Creo que sería una noticia todavía más importante si los servicios de inteligencia de Estados Unidos no estuvieran recopilando información para proteger los intereses estadounidenses tanto en casa como en el extranjero», dijo Rogers.

La NSA negó informaciones de la prensa alemana señalando que el presidente estadounidense, Barack Obama, estaba al tanto de la intervención del teléfono de la canciller de Alemania, Angela Merkel. Por su parte, la portavoz del Consejo de Seguridad Nacional (dependiente de la presidencia), Caitlin Hayden, dijo que la recopilación de información de Estados Unidos fue simplemente «similar a la que recopilan todas las naciones». Dick Cheney, ex vicepresidente de EEUU que ejerció gran influencia en asuntos de inteligencia durante la administración de George W. Bush, dijo que espiar a los aliados no tenía nada de nuevo. «Es algo que hacemos desde hace largo tiempo», declaró a la cadena ABC . El legislador Peter King afirmó que Obama debería «dejar de pedir disculpas» por el caso.