Bruselas.  La oficina comunitaria de estadística Eurostat ha revisado una décima al alza el crecimiento del PIB de la eurozona durante el segundo trimestre, hasta el 0,4 %, según los datos revisados publicados hoy por la agencia con sede en Luxemburgo.

En su primera estimación del pasado 14 de agosto, el producto interior bruto (PIB) de los Diecinueve había avanzado un 0,3 % entre abril y junio.

Eurostat mantiene en su segundo cálculo el crecimiento del 0,4 % del PIB para el conjunto de la Unión Europea (UE).

Frente al segundo trimestre, en los primeros tres meses del año el PIB había aumentado un 0,5 % en ambas áreas, lo que supone una ralentización.

En términos interanuales, el PIB avanzó un 1,5 % en la eurozona y un 1,9 % en los Veintiocho en el segundo trimestre del año.

En cuanto a los datos de España, Eurostat mantiene el crecimiento del PIB español de abril a junio en el 1,0 % y el interanual en el 3,1 %, tal y como adelantó en agosto pasado.

Por Estados miembros, el PIB aumentó en todos los países comunitarios con excepción de Francia, donde el crecimiento se mantuvo estancado (un 0,0 %).

Los mayores incrementos se registraron en Letonia (un 1,2 %), Malta (1,1 %), la República Checa, España y Suecia (todos un 1,0 %), seguidos por Grecia y Polonia (ambos un 0,9 %), Eslovaquia (un 0,8 %), Estonia, Croacia, Lituania, Eslovenia y el Reino Unido (todos un 0,7 %).

Las tasas de crecimiento más bajas se observaron por contra en Holanda, Austria y en Rumanía (todos un 0,1 %).

Por componentes, durante el segundo trimestre el gasto en consumo por parte de los hogares aumentó un 0,4 % tanto en la eurozona como en el conjunto de la UE, tras un incremento del 0,5 % y del 0,6 %, respectivamente en el trimestre anterior.

La formación bruta de capital fijo descendió un 0,5 % en la zona del euro y un 0,1 % en los Veintiocho, tras un incremento anterior del 1,4 % en ambas áreas.

Las exportaciones crecieron un 1,6 % tanto en la eurozona como en la UE (tras un aumento del 1,0 % en ambas áreas en el trimestre anterior), en tanto que las importaciones aumentaron un 1,0 % en los diecinueve países que comparten la moneda única y un 0,8 % en la UE.

(tras un incremento del 1,5 % y del 1,6 %, respectivamente)   El gasto en consumo de los hogares tuvo una contribución positiva al crecimiento del PIB en la zona del euro y la UE (0,2 y 0,3 puntos porcentuales).

La formación bruta de capital lastró el PIB en la eurozona (en 0,1 puntos porcentuales), pero fue neutral en el caso del conjunto del bloque comunitario.

La contribución de la balanza exterior al crecimiento del PIB fue positiva en ambas áreas, mientras que la aportación de los cambios en los inventarios fue negativa.