La exdirectora de la Dirección General de Impuestos Internos (DGII), Germania Montás, dijo ayer que para controlar la evasión y la elusión fiscal en el país, se requieren medidas de ajustes a la legislación y fortalecimiento a la administración tributaria.

Opinó a propósito de lo expuesto por el presidente, Danilo Medina, durante su discurso de juramentación para el periodo 2016-2020, en el que señaló que “no es justo que el grueso de la tributación siga en los hombros de los ciudadanos y especialmente sobre la clase media, mientras que los que más deben y pueden contribuir aprovechan resquicios legales para no contribuir de forma solidaria al desarrollo del país”.

Montás precisó que estas acciones necesitan tiempo y consistencia para que ambos maduren.

Recordó que los principales ajustes de la Ley se refieren al título I del Código Tributario, que prácticamente no ha sido tocado desde 1992, para mejorar o introducir cláusulas antielusivas, ampliación de las facultades de la administración tributaria y mejora del régimen sancionador, entre otros.

A favor de clase. En cuanto a la carga impositiva que recibe la clase media, sostuvo que se deben revisar los impuestos directos que gravan a este sector y además controlar la evasión.

La experta en temas tributario explicó que la clase media percibe una alta carga impositiva por dos razones: que prevalecen los impuestos al consumo (ITBIS, selectivos a combustibles etc) y que para los asalariados y consumidores no hay posibilidad de evasión porque se les retiene el impuesto al momento del pago o compra.

Cambio. Otro de los puntos que puede servir para hacer más eficiente la administración tributaria es crear las normativas para que la organización sea fuerte, darle continuidad en el tiempo, y evitar que un cambio de la alta gerencia impacte el desarrollo de la organización, apuntó Montás.

La exdirectora de la DGII añadió que para lograr lo antes expuesto, se requiere contar con técnicos ética y profesionalmente inobjetables, usar tecnología de punta, retomar la carrera tributaria a fin de darle seguridad a los técnicos capacitados para ejercer una labor objetiva y eficiente, ya que las medidas de control de evasión y elusión requieren de una administración tributaria fuerte.

En otro tenor, al preguntarle sobre qué resolvería el pacto fiscal, contestó: “si partimos de que el pacto fiscal lo establece la Ley de Estrategia Nacional de Desarrollo, el pacto incluye que se aumenten los ingresos fiscales (presión tributaria) basándose en aspectos como crear mecanismos de control de la evasión, sustentar el sistema tributario en impuestos directos para mejorar la equidad y racionalizar las exenciones, y por otro lado elevar la calidad del gasto público y disponer de una ley de responsabilidad fiscal”, apuntó Montás.

Manifestó que como se observa, el pacto es un instrumento concebido por la ley para resolver problemas fiscales de fondo, e incluye los lineamientos para ser incluidos en los acuerdos que permitan sustentar la inversión pública en el mediano y largo plazo.