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LA PAZ (AP). El presidente Evo Morales devolvió ayer, martes, a la Corte Nacional Electoral el equivalente a 1,4 millón de dólares, el 60% de los dineros públicos que recibió su partido para financiarse en las recientes elecciones generales. «No es la primera vez que devolvemos dineros que nos sobraron», dijo Morales durante una reunión con el presidente de la Corte Nacional Electoral, Salvador Romero.
De acuerdo con la legislación boliviana, los partidos políticos reciben un financiamiento estatal para costear sus campañas electorales si logran superar un determinado porcentaje de votación.
Morales también destacó el papel del tribunal electoral en las comicios del 2 de julio cuando los bolivianos eligieron a 255 representantes a la Asamblea Constituyente y votaron en un referéndum sobre autonomías para las regiones. «La elección fue transparte», señaló.
Asimismo, llamó a «deponer actitudes de confrontación» regional que surgieron tras los resultados, en una referencia al resultado del referéndum sobre autonomías regionales.
El triunfo del «no en cinco regiones y del «sí en cuatro, desató tensiones entre el gobierno que se opone a las autonomías y Santa Cruz, la región del oriente boliviano, que reclama una administración autónoma.
El tribunal electoral finalizó los cómputos de los comicios el martes y confirmó que el «no ganó con el 57,5% a nivel nacional, mientras que el «sí triunfó en los departamentos del oriente: Santa Cruz, Beni y Pando y en la sureña región de Tarija.
También confirmó el triunfo del partido de Morales, el Movimiento al Socialismo (MAS) con el 50,7% de votos y 137 asambleístas de un total de 255.
La fuerza opositora Poder Democrático y Social (Podemos) del ex presidente conservador Jorge Quiroga, logró el segundo lugar con el 15,3% de los sufragios y 60 representantes.
El tercer lugar fue para una alianza liderada por el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR), el partido del depuesto ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada que con 7,5% de votos logró 18 representantes.En cuarto puesto se colocó la centrista Unidad Nacional (UN), con el 7,2% de los sufragios y 8 asambleístas.
El resto de los representantes nacionales están distribuidos entre otras doce fuerzas menores.
El ausentismo alcanzó al 15%, declaró el martes el presidente del órgano electoral, Salvador Romero.
Aunque Morales sumó otra victoria electoral, el porcentaje que logró ahora está por debajo del 54% que sumó en las elecciones generales de diciembre, pero su partido tiene esta vez mayor presencia nacional.
Sin embargo, quedó lejos de alcanzar dos tercios de representantes (170) necesarios para aprobar la carta constitucional como se proponía, pero tiene las mayores posibilidades de sumar aliados. El mandatario anticipó que quiere «refundar Bolivia en la Asamblea Constituyente.
También Podemos anunció que buscará alianzas con fuerzas menores para contrarrestar la presencia «hegemónica del gobierno.
