LA PAZ.  AP.  El presidente Evo Morales derogó una medida que habría forzado a sacar de circulación a cerca del 60% de la flota de vehículos de transporte público, la cual amenazaba con desatar nuevas protestas populares y ponía en riesgo miles de empleos.

“Quiero decirles de manera pública que hemos cometido un gran error… lamentablemente a veces por errores técnicos se pueden cometer errores. ¿Quién no se equivoca? Me equivoqué y por eso esta corrección urgente para evitar conflictos”, dijo el mandatario tras una larga negociación el domingo con los transportistas. 

El ministro de Comunicación Iván Canelas elogió que los choferes desistieron de las protestas que tenían previstas y justificó a Morales.“El único que no comete errores es el que no hace nada”, señaló el lunes.  Morales aprobó un decreto que obligaba a retirar vehículos del transporte público con 12 años de antigüedad, pero dijo que la medida hubiera afectado una fuente de empleo que beneficia a sectores “pobres”.  Es la segunda vez que deroga una medida para desactivar protestas. A finales de 2010 dio marcha atrás en la anulación de un subsidio que habría elevado el precio de los combustibles en hasta el 70%, lo que desató duras protestas callejeras.  Morales mantiene un discurso ecologista y con frecuencia habla de defender a la Madre Tierra. En 2008 prohibió la importación de autos usados alegando razones ambientales porque dijo que no quería el país sea “basurero de chatarra”; aun así, una cantidad de vehículos usados entran de contrabando al país, principalmente desde Chile.

Los transportistas aseguran que más del 60% del parque automotor del país tiene una antigüedad de 12 años y el retiro de vehículos hubiera dejado a miles sin empleo.