Al liderazgo político, económico, social y religioso (3/3)

En la entrega anterior comentamos la proyección con tendencia a la baja de la inflación a nivel mundial del FMI como consecuencia de las restricciones monetarias adoptadas para reducir la demanda agregada. El aumento de las tasas de interés ha estimulado: aumento de los ahorros de las familias (posposición del consumo presente) y la reducción del consumo dependiente de la tasa de interés (demanda de vivienda, compra de vehículos nuevos, etc.), mientras el aumento de la tasa de interés desaceleró la inversión repercutiendo negativamente en la oferta.

Ha surgido una pregunta pertinente en el debate sobre la inflación, el mercado de trabajo y el crecimiento económico: ¿Sería posible mantener las ganancias obtenidas en el mercado de trabajo, con una política monetaria restrictiva de reducción de la inflación? Esta pregunta es relevante e importante pues, contribuye a delinear las políticas económicas en los próximos años.

Algunos notables economistas piensan que Jerome Powell podría mantener la fortaleza del mercado de trabajo dejando de lado el objetivo del aterrizaje suave (soft landing), manteniendo nivel muy bajo de desempleos, baja inflacionaria de 8% en 2022 a cerca de 5% en el 2023 y a su nivel histórico de 3% para el 2024.

Puede leer: Evolución de la inflación en la economía mundial

El consumo se relacionó con la evolución del mercado de trabajo durante la pandemia, provocado una mejora importante del consumo especialmente el duradero y, a una mejoría moderada, en la inversión pública y privada.

Un miembro importante de la FED, Christopher Waller, piensa en la posibilidad de nuevo aumento en tasa de interés, hasta ahora, la mayoría de los miembros de esa institución, creen que no será necesario.

La atención de los hacedores de política económica, no obstante, el transito mundial por confluyentes acontecimientos: fricción China-Occidente, gran polarización en Norteamérica y reducción paulatina de la globalización, debe enfocarse en crecimiento económico, mercado de trabajo robusto e inflación moderada.

A nuestro juicio, La República Dominicana, aun existiendo incertidumbres económicas y geopolíticas globales, está en la más importante oportunidad histórica, si se aboca a:

1. Mejorar la orientación del gasto gubernamental aumentando el porcentaje al sector productivo: reorientación importante de préstamos de la banca formal, reduciendo el porcentaje al consumo (40%), aumentando el del sector productivo (16% actualmente).
2. Masiva participación de la diáspora en el proceso socio-económico nacional.
3. Crear las condiciones (como México) para que la nación se beneficie del proceso de nearshoring dada su posición geográfica y estabilidad política, permitiéndole participar en el mercado de la costa este de Norteamérica con 120 millones de consumidores pudientes, Cuba es la segunda nación, pero no tienes relaciones con Norteamérica.
4. Transformaciones en el sistema educativo (en un mundo cambiante continuamente) de manera que los graduados estén íntimamente vinculados a la demanda cambiante del mercado laboral mundial.

No tenemos dudas que, logrando la unidad del liderazgo nacional y la concienciación de la sociedad sobre estos tópicos, alcanzaremos este noble objetivo.

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