POR CARMEN MATOS
A sus 23 años de edad y con a penas un título de bachiller, Máximo Eugenio Chávez es profesor de Ciencias Naturales en el Liceo Matutino Haras Nacionales, de Villa Mella, donde  junto a otros tres jóvenes ayuda a enfrentar la carencia de docentes.

Movido un gran deseo de cooperación, Máximo asegura que inmediatamente se enteró de la problemática  se puso a disposición del plantel en que se graduó hace sólo cinco años.

 El también estudiante de publicidad en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) confesó que trabaja en forma voluntaria y que no le preocupa recibir un sueldo.

Como él, otros dos ex alumnos imparten educación física y matemáticas, áreas que exigen altas competencias académicas.

El rendimiento de los estudiantes fue evaluado por la directora, María Sánchez,  de “regular” y especificó que  estos son constantemente supervisados  por los profesores.

Visiblemente agradecida por la actitud de los “monitores”, la maestra narró las vicisitudes que ha enfrentado para  completar el personal, por lo que en un momento llegó  a tener hasta  10 jóvenes recién graduados, impartiendo clases regularmente.

 Dijo que el centro educativo, que alberga a 586 estudiantes, además necesita de butacas y mobiliario de oficina.