Hoy 
El doctor Emilio Mena Castro, exdirector del hospital infantil Robert Reid Cabral, calificó de injusta e inaceptable que se pretenda minimizar la intervenciones que hiciera a ese centro la entonces primera dama y ahora vicepresidenta de la República Margarita Cedeño de Fernández.
En carta al director del periódico Hoy, Bienvenido Álvarez Vega, Mena rechaza los cuestionamientos que hiciera en un articulo el pasado domingo el economista Guillermo Caram a la intervención de Cedeño en el centro hospitalario.
El hospital es centro de controversia luego de que en un fin de semana murieran 11 niños, hecho antecedido por múltiples denuncias de las precariedades por las que atraviesa el centro, lo que motivó la destitución del ministro de Salud Pública.
Mena indicó que a través de Cedeño se logró remodelar la infraestructura del hospital, lo que permitió duplicar la capacidad quirúrgica, tener una nueva emergencia, así como varias unidades especializadas y de apoyo administrativo.
Destacó el apoyo de Cedeño en áreas esenciales como las de cardiología, cirugía general, neurocirugía, oncología, nefrología, infectología, laboratorios de imágenes diagnósticas.
Dijo que desde el 2005, además de adicionar cuatro quirófanos, se construyó una nueva unidad de hemodiálisis, de cateterismo cardíaco, dos de cuidados intensivos, una pediátrica y otra neonatal, el reacondicionamiento de los salones de conferencia y docencia, remodelación y equipamiento del área de cocina, construcción de un nuevo comedor, una cafetería, una capilla, espacio de descanso para las madres, incluyendo un lactario, así como un segundo ascensor para pacientes quirúrgicos.
De manera particular, Mena destacó el impacto que tuvo la construcción de una nueva emergencia, ya que la antigua había colapsado, con lo cual se logró aumentar de dos a ocho cubículos.
Ex director, Emilio Mena Castro.
Además al área de urgencias, conexa a la emergencia para internamientos de corta duración, se le duplicó su capacidad, se adicionó una zona para terapia de rehidratación oral y otra para tratar niños con crisis de asma bronquial.
“Es bueno acotar que esta importante inversión no sobrecargó el presupuesto estatal, pues la mayoría de los recursos provenían de donaciones y recaudaciones de las galas de navidad, organizadas por el Despacho de la Primera Dama de entonces”, indicó Mena.
Mena consideró que el proyecto de remodelación y equipamiento del Robert Reid Cabral no tiene precedentes en el país y obedeció a una sentida necesidad de las familias pobres, de los médicos, enfermeras, bioanalistas y trabajadores en general de la institución.
“Pretender minimizar el impacto de ese gran proyecto a favor de las familias más depauperadas del país, a consecuencia de la situación que está viviendo el hospital en las últimas semanas es una acción sencillamente injusta e inaceptable”, apuntó.
Referencia. Mena consideró que los ataques contra el centro y su personal son también injustos, pues allí cada años se sirven cerca de 250,000 consultas generales y especializadas, se ingresan más de 15,000 pacientes, se realizan más de 2000 intervenciones quirúrgicas mayores, miles de procedimientos de hemodiálisis y diálisis peritoneal, centenares de sesiones de quimioterapias para niños con cáncer, cateterismo, miles de estudios de imágenes y pruebas de laboratorios sin que las familias tengan que entregar un solo peso de sus bolsillos.
