BOGOTA, Oct 15 (AFP) – El ex presidente de Ecuador Lucio Gutiérrez, recluido en una cárcel para delincuentes comunes en ese país dijo este sábado a medios colombianos que se siente más seguro al lado de los presos que lo acompañan que con los «ladrones de cuello blanco» del gobierno de Alfredo Palacio.

   «Los detenidos hacían sonar sus puertas y gritaban ¡Lucio Gutiérrez Presidente! y pienso que con esta gente que está aquí estoy más seguro que con los delincuentes de cuello blanco que están todavía en impunidad», dijo el ex mandatario a radio Caracol refiriéndose al gobierno de Palacio.

   Gutiérrez salió de Colombia este viernes hacia Ecuador casi seis meses después de su derrocamiento, en un abierto desafío a una orden de arresto en su contra y en un retorno con contratiempos por una falla en el avión que en principio lo trasladaba.

   Al ser interrogado sobre la posibilidad de que se esté fraguando en Ecuador un atentado contra su vida, el detenido político confesó que goza de tranquilidad gracias a que está convencido de su honestidad aunque tomará precauciones.

   «Estoy tranquilo, soy muy creyente y pienso que no tendría que preocuparme por mi vida, más bien mis amigos y familiares están preocupados por lo que me pueda pasar pero he visto actitudes solidarias aquí. Voy a estar muy atento y voy a tomar medidas de seguridad».

   El avión de Gutiérrez aterrizó a las 19H50 (00H50 GMT) en una base militar adjunta al aeropuerto Eloy Alfaro de la ciudad ecuatoriana de Manta, donde fue detenido junto con su hermano, el ex diputado Gílmar Gutiérrez, por las autoridades migratorias según notificó un fotógrafo de la AFP.

   Gutiérrez agregó que espera obtener el apoyo de la comunidad internacional para garantizar que sea juzgado con imparcialidad por la justicia ecuatoriana  y acusó al gobierno de «ilegítimo» toda vez que se estableció por medio de la «usurpación».

   «El presidente constitucional esté en el exilio, esté en la prisión, esté donde esté, sigue siendo Lucio Gutiérrez hasta el 15 de enero del año 2007 porque así lo decidieron tres millones de ecuatorianos», ratificó.

   Agregó que buscará «algo así como una auditoria internacional para que se conozca la verdad de la politización de la justicia en el Ecuador».

   Según el ex presidente, en Manta hubo «miles de personas que soportaron gases y una represión brutal» de las autoridades policiales de Ecuador que impedían a los manifestantes darle la bienvenida.

   Sobre el ex mandatario pesaba una orden de captura por atentar contra la seguridad del Estado. También está acusado de violaciones a los derechos humanos.

   Gutiérrez, quien había llegado a Bogotá el 21 de septiembre, regresa a su país en momentos en que Palacio enfrenta una crisis por la renuncia el miércoles del ministro del Interior, Oswaldo Molestina, el sexto miembro del gabinete que dimite en cinco meses.