Ex procurador asegura «desorden organizado» del país favorece a autoridades

Ex procurador asegura «desorden organizado» del país favorece a autoridades

El ex procurador general de la República Víctor Céspedes Martínez, aseguró hoy que la República Dominicana «es un desorden bien organizado», al tiempo que expresó que esta situación le conviene a las autoridades y al Gobierno, debido a que se aprovechan para cometer irregularidades.

Céspedes Martínez expresó que la delincuencia en el país se manifiesta en todas las capas sociales donde, a su entender, existe una cascada de criminalidad encabezada por el poder.

“La seguridad de la ciudadanía se ha convertido en una gran dificultad para esta administración que ha permitido la perpetuación de los actos delictivos por encima de ellos”, puntualizó al ser entrevistado por el periodista Salvador Holguín y Juan Tomás Taveras, en el programa “Ojo Crítico” que se transmite por el canal Hilando Fino TV.

El ex funcionario se refirió a los actos al margen de la ley perpetuados por la Policía Nacional, indicando que éstos no cargan con toda la responsabilidad de los hechos ocurridos, tras resaltar la precariedad en que se desenvuelven por la falta de incentivos del Estado.

En otro orden, Céspedes Martínez dijo que la institucionalidad peligra a causa del «desorden organizado» que existe en el país, afectando en primera instancia a los funcionarios y con ellos al país.

Sostuvo que muchos de estos burócratas buscan que el presidente de la República, Danilo Medina, permanezca en el poder, lo que a su juicio significaría la antesala o materialización de una «dictadura moderna».

Señaló que si el jefe del Estado modifica nuevamente la Constitución para reelegirse, afectaría dicha institucionalidad, provocando así el comienzo de un frente colectivo para enfrentarlo, además de que originaría la división del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y el fin de su gobernabilidad.

Mientras que al referirse a la resolución emitida por la Junta Central Electoral (JCE) que dispone el cese de proselitismos, Céspedes Martínez calificó la acción como un acto revestido de vicios y que evidencia una parcialidad.

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