Pese a las voces agoreras y politiqueras de algunos dirigentes de la oposición al gobierno del presidente Luis Abinader, la economía del país, no obstante a la crisis que afecta al mundo, acaba de posicionarse en el número siete en Latinoamérica y el Caribe, superando a países que como Brasil, México y Argentina se destacan por el tamaño de su PIB, de acuerdo a datos del Fondo Monetario Internacional (FMI) que sostiene que el crecimiento proyectado para este año es de 5.5 por ciento.
Los análisis económicos del organismo internacional sostienen que la República Dominicana es el segundo país, del grupo analizado, con el más alto nivel de inversiones financieras que ascienden a 15,816 millones de dólares lo que repercute directamente en el crecimiento del empleo. Podemos citar, a manera de ejemplo, los 190,472 trabajos directos originados en el sector zonas francas sin contar los miles de puestos fijos en el área del turismo.
Pese a las adversidades económicas que nos afectan, el país seguirá creciendo gracias a la correcta administración de un gobernante que inspira confianza y atrae a las inversiones nacional y extranjera lo que esperamos siga repercutiendo en la mejoría de vida de los sectores más empobrecidos de la sociedad dominicana.