Uno de los muchos atractivos que tiene Punta Cana, una de las zonas turísticas más importantes de la República Dominicana, son los cenotes, cuevas sumergidas bajo el agua que se han convertido en la excursión favorita de miles de visitantes.
De acuerdo con datos recogido por el Ministerio de Turismo, los taínos ya los utilizaban como piscinas naturales, y en sus aguas cristalinas solían nadar e incluso realizar algunos de sus ritos de purificación.
Aunque los cenotes no son exclusivos de República Dominicana (existen cenotes mayas y cuevas similares en todo el Caribe), Punta Cana cuenta con algunos de los mejores manantiales naturales de este tipo.
Cuevas que forman parte de algunas que son un destino turístico imprescindible. A continuación destacamos los seis cenotes del referido punto turístico.
Puede leer: Ejercicio físico, un poderoso elixir contra la depresión
Hoyo Azul
Con unos 14 metros de profundidad y cristalinas aguas de color turquesa, este agujero azul profundo se ubica en medio de un bosque que forma parte de Scape Park.
A este cenote se accede por un sendero algo escarpado que se adentra en el bosque, y cuando llegues podrás mirar a lo alto y asombrarte viendo un espectacular acantilado de 75 metros cubierto por vegetación, que hace de este lugar un rincón mágico donde disfrutar de un baño único.
Hoyo Claro
Hoyo Claro tiene unos 10 metros de profundidad, y se encuentra en medio de un bosque tropical. Es un lugar muy tranquilo porque todavía no es un destino turístico muy explotado, y además resulta algo difícil de encontrar, lo que lo convierte en uno de los cenotes ideales para hacer una excursión diferente debido a que ofrece la sensación de haber llegado a un lugar secreto.
Reserva Ojos Indígenas
Los habitantes de la zona lo conocen como la Laguna de Punta Cana, y se encuentra en una reserva ecológica protegida, donde se realizan tareas de conservación, investigación y repoblación de especies.
Este cenote cuenta con 12 manantiales que salen de la tierra y que ofrecen un agua cristalina ideal para el baño. Además, se escucha el sonido de los pájaros que habitan los alrededores. Podrás caminar por el sendero que recorre todos los lugares en los que hay agua, los “ojos” que dan nombre a este particular cenote.
Hoyo del Salado
Este se ubica cerca de Macao y es uno de los que más excursiones reciben a diario. Su profundidad alcanza los 8 metros y tiene una longitud de 50 metros, con un agua limpia que está cubierta por una cueva de la que cuelgan cantidades de estalactitas. (Una estalactita es un espeleotema que cuelga del techo de una cueva).
Laguna Dudú
Dos lagunas forman este cenote, una de ellas rodeada de zonas desde las que saltar, y otra que se comunica con esta bajo el agua que permite realizar una actividad única en el mundo, que es practicar espeleología a través del buceo. Aunque no hace falta llegar a este extremo para disfrutar de la belleza de esta laguna natural rodeada de frondosos árboles y cuevas en las que se pueden ver pinturas rupestres realizadas por los taínos, los mejores conocedores de los túneles que se ocultan bajo esta laguna.
Hoyos Las Ondas
Macao se destaca por ser una playa virgen, el cenote Las Ondas se parece a un spa exclavado de forma natural en la roca. Se trata de una caverna por la que entra algo de luz, lo que hace que el agua tenga una temperatura bastante fresca.