El Colectivo de Defensa de Derechos Humanos de los grupos vulnerables demandó ayer del Gobierno la solución de los problemas que tiene pendiente con esos sectores de la sociedad que son objeto de abusos y violencia sistemática, en violación a las normas nacionales e internacionales.

Durante un encuentro realizado en el Centro Bonó, las diez organizaciones que integran el Colectivo acordaron aunar esfuerzos y realizar acciones para reclamar el cumplimiento de sus derechos, garantizados en el artículo 139 de la Constitución dominicana, y en la Declaración Universal de los Derechos Humanos.

Esas organizaciones son la de mujeres de ascendencia haitiana (MUDHA); Junta de Mujeres “Mamá Tingó”; Centro Cultural Dominico-Haitiano Jacques Viaux(CCDH-JV); el colectivo LGBT; la Comunidad de Trans (Cotravetd); Red de Voluntarios Amigos Siempre Amigos (Revasa); Coordinadora Lésbica y de Hombres Trans (Coleht), y el Grupo de Jóvenes del Batey Los Jovillos de Villa Mella.

Abuso de todo tipo. Se quejaron de la falta de políticas públicas para su protección frente a la discriminación, impunidad en los casos de crímenes de odio y delitos, y otros abusos en su contra, incluso por parte de algunas autoridades.

“En República Dominicana la inmensa mayoría no disfruta de los derechos humanos; lo pobres no tienen acceso al servicio integral de salud; las mujeres siguen enfrentando inequidad social, falta de derecho a salud sexual y reproductivo; son víctimas de violencia de género; las personas con preferencia sexual diferente son acosadas, discriminadas y excluidas; las trabajadoras sexuales son víctimas de violencia y extorsión policial”, afirmó Olga Reyes, coordinadora del Colectivo.

Violencia de género. Dijo que este tema y el de los feminicidios en el país son “alarmantes” porque las políticas del Gobierno en ese sentido han sido “limitadas e ineficaces”, ya que no ha habido un presupuesto destinado a enfrentar esa situación.

Caso dominico-haitiano. Reyes dijo que pese a todos los “alardes” hechos por el Gobierno diciendo que la Ley 169-14 iba a resolver el problema de los dominicanos de ascendencia haitiana, 55,000 aún esperan regularizar su situación.

En el caso de la comunidad LGTB y las trabajadoras sexuales, dijo que estos siguen siendo víctimas de discriminación y exclusión frente al acceso de los servicios fundamentales.