El presidente de la Mancomunidad de Ayuntamientos del Gran Santo Domingo (MGSD) René Polanco, exige al Ministerio de Medio Ambiente, Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (Caasd) tomar medidas para descontaminar los río Isabela y el Ozama, que ya no soportan más cargas de residuos líquidos y sólidos.
René Polanco, alcalde de Santo Domingo Norte (SDN) recuerda que la mayoría de las industrias ubicadas en el Distrito Nacional, Santo Domingo Norte y Este, no disponen de plantas de tratamiento, por lo que vierten sus químicos y sólidos directamente a los ríos Ozama e Isabela.

Deplora los límites que tienen los ayuntamientos para actuar contra quienes se dedican a la destrucción de los acuíferos, por lo que exige al Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales y a la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (Caasd) hacer lo que la Ley ordena.

En cuanto a los lixiviados que llegan al Isabela desde Duquesa, Polanco respondió que hace los esfuerzos necesarios para que ese botadero de basura deje de ser un dolor de cabeza para la contaminación de Santo Domingo.
Al llamado se suma el ingeniero agroforestal, especialista en ecología tropical y planificación ambiental, Eleuterio Martínez, quien sugiere a los organismos estatales crear los mecanismos correspondientes que contemplan la ley para disminuir la contaminación.
Martínez estima que hay que evitar que tanto las escorrentías superficiales como subterráneas no lleguen tan contaminantes a los ríos, que es lo que sucede en el Isabela y el Ozama.
Desde el puente Presidente Peynado se observa una gran alfombra verde sobre el Isabela, que cubre prácticamente todo el cauce kilómetros hacia arriba, lo que los expertos atribuyen a la contaminación.
Eso indica, precisa, que al Isabela llega una carga muy fuerte de contaminación, desde el vertedero de Duquesa, así como la sequía que afecta al país, ya que si el río baja con agua suficiente desde Villa Altagracia la lila no coparía el caudal, además de que la especie no resiste el agua limpia.
“La lila es una bendición para el río como está ahora, porque lo que hace es retirar el contaminante, sucede que por las raíces expide más oxígeno que por las hojas; ella lo que hace es un colchón para que los pocos peces, cangrejo y otros puedan sobrevivir, porque no hay oxígeno disuelto”, explica.
Abandono. La Fundación Saneamiento Ambiental Integral (Funsai) acusa al ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Ángel Estévez, de abandonar el programa de rescate de los ríos Ozama e Isabela que inició el anterior incumbe, Francisco Domínguez Brito.
De igual modo, a los ayuntamientos del Gran Santo Domingo, de no tomar en serio la recolección y disposición final de los recursos sólidos, por lo que la contaminación de las fuentes citadas sigue creciendo.
Francisco Reyes, coordinador de la entidad, considera que de nada sirve que el Gobierno a través de la Caasd construyan la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales Mirador Norte, si las instituciones que deben velar por la protección del ambiente están de brazos cruzados.