Brasilia.– El exministro de Hacienda Nelson Barbosa insistió hoy en que el juicio político abierto contra la presidenta suspendida de Brasil, Dilma Rousseff, carece de “toda base legal”, al intervenir ante la comisión del Senado responsable del proceso.
Barbosa, quien fue titular de Hacienda entre el 18 de diciembre de 2015 y el 12 de mayo pasado, cuando Rousseff fue suspendida de sus funciones, compareció como testigo de la defensa y presentó una densa explicación técnica sobre las supuestas maniobras fiscales que han dado pie al juicio de destitución.
La acusación se basa en decretos que alteraron los presupuestos que Rousseff firmó sin la debida autorización del Congreso y en una serie de atrasos en los pagos de compromisos del Gobierno con los bancos públicos que generaron una abultada deuda, que fue omitida de los resultados de los años 2014 y 2015.
Según Barbosa, esos decretos son previstos en las leyes referidas al manejo de los presupuestos y fueron aprobados por las cámaras legislativas, aunque admitió que el visto bueno del Congreso fue dado meses después de que fueron firmados e incluso ejecutados.
También insistió en que no hubo “ninguna irregularidad” en las relaciones del Gobierno con la banca pública y negó que las deudas acumuladas constituyeran créditos, como sostiene la acusación por el hecho de que acabaron generando elevados intereses.