Expectativa por regreso de Cuba a Serie del Caribe

<P>Expectativa por regreso de Cuba a Serie del Caribe</P>

CARACAS, Venezuela. AP. Antaño se decía que cualquier pelotero cubano tenía la capacidad de jugar en las Grandes Ligas, y su dominio en torneos internacionales como los Juegos Olímpicos, sumado al arribo a las mayores de un número significativo de jugadores que desertaron de la isla, nutrió enormemente esa creencia.   

Pero en años recientes, particularmente después que se permitió la presencia de profesionales en torneos antes reservados exclusivamente para aficionados, el desempeño de los equipos cubanos ha sido discreto.   

Cuba lleva ocho años sin conquistar un gran título internacional y en el pasado Clásico Mundial fue eliminado por Holanda que avanzó a semifinales.  

Los cubanos guardan por ahora el recuerdo de sus triunfos en los Juegos Olímpicos de 1992, 1996 y 2004, e incluso su derrota en la final ante Japón en el primer Clásico en 2006.   

Pero ahora tendrán la oportunidad de demostrar que siguen siendo una potencia regional, cuando se produzca su retorno a La Serie del Caribe en febrero.   

El esperado regreso, después de 53 años, se producirá en la próxima edición de la Serie del Caribe, que se disputará entre el 2 y 8 de febrero en la turística isla venezolana de Margarita.   

El presidente de la Federación Cubana de Béisbol, Higinio Vélez, anunció el 10 de junio que el equipo campeón de la serie final entre Matanzas y Villa Clara será el representante de la mayor de las Antillas en la Serie del Caribe, donde participan los equipos campeones de México, Puerto Rico, República Dominicana y Venezuela.   

Cuba ganó siete de las primeras 12 ediciones disputadas en este torneo regional, que se inició en 1949 en la isla. La mayoría de esos títulos los acumuló en las cinco últimas ediciones en que tomó parte: Elefantes de Cienfuegos (1956 y 1960), Tigres de Marianao (1957 y 1958) y Alacranes de Almenares (1959). En 1960, sin embargo, el líder de la revolución Fidel Castro puso punto final a esa laureada carrera al abolir el profesionalismo en el deporte.   

El acercamiento del deporte cubano al profesionalismo ha sido un proceso lento, pero sostenido en años recientes. Cuba ya participó en las tres ediciones del Clásico Mundial y planea competir en justas internacionales de boxeo que ofrecen premios.   

Juan Francisco Puello, presidente de la Confederación de Béisbol Profesional del Caribe, recordó que el regreso de Cuba se venía gestando desde 1999, pero es recién ahora cuando están dadas las condiciones.   

En el 2012, la Confederación del Caribe no aceptó el ingreso de Cuba como liga invitada a la edición en la ciudad de Hermosillo, México.   

“La idea era que regresara como miembro pleno”, dijo Oscar Prieto Párraga, presidente de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional y expropietario de los Leones de Caracas.

El regreso de Cuba se frustró en varias ocasiones debido a que no estaban en condiciones de pagar las sumas cercanas a 30.000 dólares que se exigen para pertenecer a la Confederación.   

“Era una suma muy elevada y se bajó sustancialmente”, explicó Puello, sin dar detalles.   

La iniciativa está lejos de ser un gesto simbólico, por el contrario, es parte de un plan para oxigenar el torneo que ha venido a menos en las últimas ediciones.   

“Para nadie es un secreto que la Serie estaba de capa caída, teníamos que hacer algo”, dijo a la AP Prieto Párraga, quien participó en la reunión de la Confederación del Caribe con representantes del béisbol cubano en La Habana.   

El dirigente venezolano comentó que así como a México “le tocó salvar” la Serie del Caribe en 1992, Cuba podría desempeñar un papel importante ahora. Después de los malos resultados en el intento de llevar la serie a Miami, un terreno neutral, en las ediciones de 1990 y 1991, Santo Domingo iba a ser sede, pero no pudo organizarla. La ciudad mexicana de Hermosillo realizó la serie y la salvó de lo que parecía su desaparición   

Con su incorporación al torneo en 1971, México también fue decisivo para revivir la Serie en su segunda etapa, que comenzó en 1970, en Venezuela, y no tuvo el éxito esperado en ese primer torneo en que se enfrentaron venezolanos, boricuas y dominicanos.   

“Yo siento que ahora con la llegada del campeón cubano, puede lograrse ese repunte que todos esperamos”, resaltó el dirigente venezolano.   

La escasa asistencia en las ediciones disputadas en Puerto Rico y República Dominicana y la resistencia de las autoridades de cambiar un formato que lucía agotado y restaba atractivo al torneo, figuran entre las principales causas del declive.   

Otro factor determinante a considerar es que la Serie suele terminar a menos de dos semanas de la apertura de los campos de entrenamiento de las mayores, por lo que muchas estrellas prefieren no participar para tener más tiempo de descanso.   

En la pasada edición del torneo, empezaron los cambios para rescatar el interés de los aficionados.   

En la serie disputada otra vez en Hermosillo se aplicó un nuevo formato que dispuso un juego final para definir al campeón.   

El torneo se jugó en el 2013 bajo el formato de todos contra todos a dos vueltas como se había disputado desde 1949, la novedad estuvo en que por primera vez, los dos equipos con los mejores registros tras el “round robin” disputaron un juego final que pareció rescatar la emoción perdida.   

Las ediciones de 2011 y 2012 se disputaron en general con escasa asistencia y esto se agudizó en las últimas fechas del torneo. Sin jugar, los Yaquis de Obregón, México, en la ciudad boricua de Mayagüez, y los Leones del Escogido como locales en Dominicana, se titularon campeones por adelantado.   

El nuevo formato se ajusta como anillo al dedo a la incorporación de un quinto equipo a la también llamada “serie mundial caribeña”. En la serie de Hermosillo 2013 se fijaron calendarios para uno o dos equipos más, de modo que la escena está servida.   

Cuba regresa a la Serie del Caribe “con todos los derechos y deberes que tienen los demás miembros de la Confederación”, se informó.   

De acuerdo con los estatutos de la Confederación caribeña, los cubanos recibirán los mismos premios que se les dan a todos, al campeón y al subcampeón, además de una suma como liga para cubrir diferentes gastos, incluido transporte y viáticos.

El pago a los jugadores, en tanto, incumbe solo a las autoridades cubanas.    Carlos Miguel Oropeza, gerente general de los Cardenales de Lara y de la selección venezolana en el pasado Clásico Mundial, manifestó que este “es un paso muy importante en lo que es el futuro” de la Serie. “Se había hablado mucho de que la Serie necesitaba un refrescamiento, que estaba pasando por momentos difíciles”.   

“Se espera que tanto deportivamente como a nivel de interés hacia el público, la participación de Cuba pueda ayudar por todo lo que representa en el béisbol”, expresó.   

En el terreno estrictamente deportivo, Oropeza consideró que a diferencia de la primera etapa, la participación de Cuba “será algo más equilibrado”.   

“Todos conocemos la potencia que es a nivel de béisbol, pero la cantidad de jugadores que ahorita hay (en las organizaciones de Grandes Ligas) de todas las ligas del Caribe, eso sin duda ha cerrado las brechas”, dijo a la AP. “Lo hemos vivido en campeonatos mundiales… incluso sin que exista la participación total de las grandes estrellas de nuestros países”, los equipos caribeños “le juega de tú a tú a cualquier país”.   

“Creo que deportivamente lo que vamos a presenciar es un gran espectáculo”, añadió.   

Los dirigentes de la región coinciden en que el torneo además de parejo, será interesante por ver a los cubanos en acción, tomando en cuenta su linaje y nivel competitivo.  

“Es muy bueno para el béisbol, ya que (Cuba) fue uno de los pioneros en este torneo cuando comenzó en la década de 1940”, dijo a la AP Eddie Díaz, manager de los Yaquis de Obregón. “No creo que tenemos de qué preocuparnos. Va a ser una buena competencia”.   

El presidente de la Federación Mexicana de Béisbol, Alonso Pérez, destacó que será “muy atractivo por la potencia que ha sido Cuba tanto en el clásico Mundial como en los campeonatos mundiales de la Federación Internacional y de la Confederación Panamericana”.   

“El béisbol de Cuba era muy fuerte… ahora va a ser muy atractivo porque Cuba va a jugar con sus peloteros, pues, que no están en grandes ligas y yo creo que va a ser una situación muy pareja”, comentó. “Puede ganar cualquiera en una serie corta”.   

Leonardo Matos Berrido, presidente de la Liga Dominicana de Beisbol, resaltó que esa organización “se siente satisfecha con el reingreso de Cuba… y apoyamos este movimiento que será reafirmado en la reunión que tenemos el próximo mes de julio en Venezuela”.  

 ———    Los periodistas de The Associated Press Adriana Gómez Licón, en México, y Dionisio Soldevila, en República Dominicana, contribuyeron a este despacho

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