Expectativas humanas

Expectativas humanas

Francia vivió un mes convulsionado, a causa de las propuestas para aumentar en dos años la edad para optar por pensiones. Mucho antes que ellos, los puertorriqueños se lanzaron a protestas callejeras porque el nuevo gobernador, Luis Fortuño, decidió reducir la nómina pública. El presidente de Ecuador, Rafael Correa, enfrentó una rebelión de agentes policiales y de investigación que esperaban el mantenimiento de prebendas que recibieron en el pasado. La confrontación devino en un intento de golpe de Estado, frustrado a duras penas.

Francia no encuentra descanso. Aunque se ha aplacado el muy generalizado rechazo a lo de las pensiones, surgieron paros a la transportación y trasvase de combustibles. Correa por su parte afirma que Ecuador vive un período excepcional en que no puede asegurarse la protección a la vida y hacienda de los ciudadanos. Achaca ese período de inseguridad a la actitud de los agentes del orden, que estuvieron estrechamente vinculados a la Agencia Central de Inteligencia (CIA). Correa cortó esas relaciones, conforme ha afirmado.

¿Por qué se producen estas reacciones populares, unas más difundidas que otras? El ser humano visualiza anhelos y logros que derivan de aquello que hace suyo. Los puertorriqueños que batallaron contra la disminución del gasto de personal, unos treinta mil se expuso entonces, alborotaron por algo propio. Los franceses que hace poco han paralizado actividades productivas combatían contra un Nicolás Sarkozy que pretendió quitarles una posesión. Esa propiedad eran dos años de diferencia entre la edad menor de opción a las pensiones y la nueva edad sugerida. ¡Dos años apenas, pero Francia vio resquebrajarse el sosiego de toda la nación!

Cavilo sobre ello porque las gentes asumen como derechos los espacios que la sociedad cede como norma. Y desde que las instituciones pretenden recobrar en nombre de la sociedad aquello que se ejerce por encima de lo racional, llega la algazara. Los mexicanos viven una situación aterradora por ello, frente a los traficantes de drogas. Colombia, en vías de superación recobra el alma nacional perdida en el caos de traficantes y guerrilleros. Con las protestas mantenidas en la mayor parte de Europa debido a la necesidad de recortar el gasto público, debíamos contemplarnos en el espejo. Hablar de nuevos tributos aparenta ser vía expedita. Mas no es salida del todo recomendable en medio de las angustias económicas que nos aquejan.

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