El surgimiento de  movimientos sociales  en muchas partes del mundo     es un fenómeno nuevo derivado de la globalización y de la democratización, de acuerdo al experto español en  relaciones internacionales, Celestino del Arenal.

Como otros expertos en la materia, el también politólogo cree  que en los actuales momentos está emergiendo una sociedad civil global como actor y  protagonista,  no sólo de las relaciones internacionales sino también en la propia vida interna de los Estados con la trascendencia que todo esto tiene.

Por primera vez en la historia de la humanidad los seres humanos empiezan a ser protagonistas y actores activos en el interior de los Estados, lo que es más novedoso en el escenario internacional, dice. 

Al ser entrevistado en la Fundación Global, Democracia y Desarrollo (Funglode), donde imparte un curso de verano sobre relaciones internacionales, el profesor deja claro que no  es posible establecer vínculos y relación de los movimientos sociales de reclamo de democracia  y libertad en el mundo árabe, y los que se producen en España, que exigen no sólo renovación de  la democracia sino que los gobiernos articulen políticas diferentes frente a la crisis económica a las que se han estado adoptando.

No obstante, expresa que  los movimientos sociales que se están produciendo en otras partes de la sociedad mundial se insertan dentro de una misma dinámica general, que es la  de empoderamiento de los individuos   como consecuencia, por un lado, de la base de la democracia y del proceso de globalización, en términos de superación de tiempo  y espacio.

El académico se refiere a los movimientos sociales que han surgido en Egipto, Túnez y Libia, en busca de democracia y que han producido en la mayoría de los casos la caída de dictaduras y búsqueda de libertad.

En España, el movimiento Los Indignados que surgió a raíz del M15 provocó, entre otros factores,  que el jefe de gobierno español, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, anunciara el adelanto de las elecciones legislativas para el 20 de noviembre próximo y no en marzo de 2012. La crisis económica mundial ha impactado a ese país provocando  una tasa de desocupación  por encima del 20% de la población activa.

Otra forma de participación. De acuerdo a Del Arenal los ciudadanos están buscando otras formas de participación democráticas.

Prevé el inicio de un proceso que en  los próximos años adquirirá una dimensión mucho más grande e importante y que va a afectar a todas las democracias y Estados desarrollados y en vías de desarrollo.

En muchos países del mundo  sus ciudadanos están demandando nuevas formas de participación política, la innovación de las prácticas democráticas,   que su opinión   tenga más presencia e importancia, la renovación de los partidos políticos y la aproximación con la población, Del  Arenal observa que los partidos políticos tienen tendencia, por lógica propia,  a ser cerrados y a burocratizarse.

Crisis en EE.UU.

Dijo que no hay dudas de que si se pasa la fecha tope,    el 2 de agosto, para que republicanos y demócratas se pongan de acuerdo en cuanto al techo de gastos, se agudizaría  la crisis económica que   vive ese país. Advierte que eso afectaría a los países desarrollados y en vía de desarrollo.

Está claro, dice el experto, que sin acuerdo  se agudizará la situación de crisis económica global y probablemente se acentuará más el declive del papel de Estados Unidos en el mundo. “Tendrá consecuencias en cuanto al proceso, ya iniciado hace tiempo, de redefinición de la polaridad dentro de lo que es la sociedad internacional”.

Del Arenal expresa que la crisis económica pondría de manifiesto  que las grandes potencias internacionales, Estados Unidos y  Europa, están en procesos de declive y serían sustituidas por  potencias emergentes, sobre todo China, que juega  un papel cada vez más decisivo en la agenda internacional.