República Dominicana debe realizar cambios a nivel fiscal, financiero, laboral y eléctrico para no afectar su crecimiento económico a largo plazo, de acuerdo a economistas expertos en estos temas.
Al analizar la economía dominicana actual y las perspectivas para el 2018, los economistas Ernesto Selman, Alejandro Fernández, Jacqueline Mora y Guillermo Arancibia recomiendan acciones inmediatas que aseguren la sostenibilidad del crecimiento económico en el marco de la actividad Think Economics, realizada por la Cámara de Comercio y Turismo Domínico-Suiza (CCTDS) junto con la embajada de Suiza.
Selman indicó que preocupa la sostenibilidad fiscal del país, pues el 22% de sus ingresos tributarios se utilizan para el pago de intereses del Gobierno central. Y se espera que aumente a un 24%, de acuerdo al Presupuesto General del Estado de 2018.
Expuso que la economía tiene costos ocultos, por tener muchos impuestos y altas tasas. Dijo que el sistema tributario es complejo, lo que implica un alto costo para cumplir las leyes tributarias, el tiempo para el cumplimiento eleva costo, se promueve la evasión y elusión fiscal y se eleva la informalidad.
Selman destacó que el sector eléctrico es un gran reto para el sector empresarial, ya que crea una distorsión en la economía y penaliza a las empresas y baja su competitividad.
Criticó que la distribuidora pierde una tercera parte del negocio, lo que hace al sector insostenible y estas empresas son manejadas por el Estado y están altamente politizadas.
Dijo que en la misma se ha destinado más de US$12 mil millones a subsidio. Además de que se está comprando el petróleo más barato pero siguen vendiendo la energía al precio de antes.
Selman destacó además que las empresas tiene que hacer frente a muchas trabas que dificultan el hacer negocio como son: los elevados costos para exportar; altos precios de los combustibles, elevados impuestos a los combustibles y alta tarifa del transporte de carga terrestre.
En otro orden, Fernández expuso que en 2017 es un año de ajuste en el que se esperaba que cayera el ritmo de crecimiento del crédito privado en moneda local, ya que se han tomado muchas medidas para estimular, inyectar liquidez y para que las personas continúen endeudándose tanto en los hogares como en las empresas.
Destacó que aunque hay un crecimiento del crédito privado este ha caído y se espera que siga en picada y esto no lo ve como negativo, ya que se necesita entender que se necesita un ciclo de crédito y endeudamiento continuo para ver la real burbuja financiera.
Resaltó que al evaluar la morosidad, aunque esta todavía es baja, en el último año, mientras la cartera total aumentó 8.3%, la morosa se disparó 21.1%. Por eso, de cada 10 bancos, siete están mostrando mayor cantidad de préstamos vencidos.
Expuso que se observa una dependencia hacia el crédito hacia los hogares, mucho más que los sectores productivos, pues según cifras hasta agosto, todo el crecimiento del crédito privado fue dirigido al consumo, lo cual es insostenible.
Por su lado, Mora señaló que en los primeros meses de este año se crearon más empleos en el sector informal y pocos formales, lo que lleva a problemas de la economía y afectaría el consumo.
Abogó porque se tome en cuenta el empleo juvenil o de la generación millennials, pues se deben crear estrategias para que estos se inserten en el mercado laboral, en especial para que potencialicen sus fuertes en el emprendimiento y en las carreras tecnológicas.
Entiende, además, que se debe evaluar la caída de la inversión privada, pues es impulsada mayormente por el turismo. Además que esta inversión se concentra en un 60% en Santo Domingo y en segundo lugar Santiago, por lo que insta a que del Estado se tenga una visión más geográfica.

Mientras Arancibia, gerente de JMMB espera que para el próximo año haya estabilidad en las tasas de interés, pero entiende que habrá un reajuste de las mismas, mientras el tipo de cambio será estable en el 2018, depreciándose según lo proyectado por el Estado.
Agregó que de acuerdo al Marco Macroeconómico, se espera que la economía dominicana registre una expansión real del producto interno bruto (PIB) entre 4.5% y 5.0% en 2017. Para los años siguientes la economía dominicana crecería en torno a su ritmo potencial de 5%.
Expuso que sería muy importante la aprobación de la Ley de Alianza Público-Privada, ya que generaría la creación de instrumentos adicionales para que el mercado de valores financie proyectos de infraestructura y atracción de nuevos inversionistas por la diferenciación de la inversión.
Indicó que una posible amnistía fiscal pudiera generar un efecto riqueza en el sector real y nuevos instrumentos para el mercado de valores.