POR E. RUBENS
El director del Departamento de Hidrocarburos de la Secretaría de Industria y Comercio atribuyó los aumentos registrados en las últimas semanas en los precios de los combustibles, a las variaciones en la comercialización de los derivados del petróleo en los mercados internacionales.
El ingeniero Rafael López, funcionario de la institución estatal, afirmó que Industria y Comercio procede con estricto apego a las disposiciones contenidas en la Ley 112-00, porque no es costumbre de las actuales autoridades proceder de forma ilegal en perjuicio de la sociedad.
Aclaró que el país no vende petróleo, sino combustibles procesados y que para establecer los precios de los derivados cada semana, se toman como referencia los precios de la gasolina y el gasoil en los mercados internacionales.
El hecho de que el precio del crudo suba o baje en los mercados internacionales, no significa que tenga que producirse una rebaja o un alza en los precios locales, ya que estos se rigen a partir de cómo se comercialicen los derivados procesados, no el crudo, explicó.
Sostuvo que tiene que quedar claro que para fijar el precio de los combustibles cada semana, se tiene en cuenta el comportamiento de la prima del dólar y el precio del combustible que se toma como referencia en el mercado internacional, que es la gasolina, no al crudo, ya que se trata de mercados diferentes.
Indicó que en comparación con las dos semanas anteriores, la variación en los precios registró un incremento del 13%, lo que motivó los aumentos de la presente semana. El director de Hidrocarburos advirtió que persiste el temor de que no haya suficiente gasolina para abastecer la demanda de los consumidores norteamericanos en el próximo verano.
Afecta el temor que hay entre los que intervienen en el mercado de valores de los Estados Unidos, de que no haya suficiente gasolina para suplir los requerimientos de esa nación en el próximo verano, dijo.
López agregó que cuando ocurre eso, se proyecta que el consumo será mayor que la oferta y entonces esto presiona los precios hacia arriba, que es lo que ha estado pasando en las últimas semanas.
Expresó que de acuerdo a las proyecciones que se han hecho en el mercado norteamericano, se estima que los ciudadanos van a demandar por encima de lo normal y esto aumentará el consumo de combustibles, lo que se va a traducir en alzas de los precios de los derivados debido al nerviosismo que se crea en el mercado.
La acusación de que violamos la ley con la aplicación de los precios a los combustibles es insustentable y risible, toda vez que los criterios que se toman en cuenta para estos fines, son los que justamente exige la legislación vigente, manifestó López.
Dijo que las resoluciones de cada semana se hacen en consonancia estricta con el artículo 8 de la ley 112-00, que establece un impuesto a los combustibles fósiles, para lo que se toma en cuenta el precio de los combustibles procesados en los mercados de referencia y la tasa de cotización del dólar en el mercado bancario nacional.