El Gobierno emitió ayer un comunicado en el que explica que observó la ley que permitiría la importación de vehículos de hasta siete años porque de ser promulgada generaría amplios efectos negativos sobre las recaudaciones, la balanza de pagos, el medio ambiente y la salud. Según las razones que ofrece el Gobierno en el comunicado, se estima una pérdida de ingresos tributarios de aproximadamente dos mil millones de pesos, solo en el primer año.

“La medida afecta directamente la base imponible, reduciendo las recaudaciones por el arancel. Afecta negativamente los impuestos a la Transferencia de Bienes Industrializados y Servicios (Itbis), a la Emisión de la Primera Placa, a las Transferencias de Vehículos y a la Circulación Vehicular”, explica.

Entre otras razones, el Gobierno expone que se generaría un impacto negativo en la balanza de pagos, y anularía los efectos positivos que sobre el medio ambiente comenzó a generar el Impuesto a la Emisión de C02 establecido mediante la Ley No. 253-12 de Reforma Tributaria.

Es el primer y único impuesto verde en el país. “El grueso del parque vehicular dominicano es, de por sí, obsoleto. Sin contar las motocicletas o los vehículos fabricados durante 2014 registrados en el país, seis de cada diez carros que circulan por nuestras calles tienen más de siete años de fabricación”, agrega.