La explosión de una vieja tubería de vapor en Manhattan, en la Quinta Avenida de Nueva York, causó ayer cinco heridos y la evacuación de 28 edificios, además de cortes de tráfico. “Estamos operando con mucha precaución ya que esta tubería de vapor se instaló en 1932, por lo que posiblemente haya presencia de asbesto”, advirtieron los bomberos a través de sus redes sociales, en alusión a un aislante utilizado hace años y cuya inhalación prolongada puede provocar cáncer.
Las autoridades locales tomaron muestras y, a la espera de los resultados de laboratorio, operan como si estas fueran positivas, por lo que 100 miembros del cuerpo de bomberos requerirán de una descontaminación, así como otros miembros que operan allí y diversos ciudadanos.
Un portavoz del Departamento de Bomberos de Nueva York dijo que se recibió una llamada a las 06.39 de la mañana por una “explosión de vapor a alta presión” en el vecindario cerca de Madison Square Park. Una hora más tarde, 25 camiones de bomberos y más de 100 bomberos y personal médico estaban en la escena. No hubo heridos ni muertes, confirmó el departamento de Bomberos de Nueva York a través de Twitter, aunque el estallido provocó columna de humo.