Exporta más por TLC

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CIUDAD DE GUATEMALA.-A mayo de este año, las exportaciones de Guatemala llegaron a niveles sin precedentes. La presidenta del Banco de Guatemala (central), María Antonieta del Cid de Bonilla, informó  las exportaciones crecieron 29.2 por ciento en los primeros cinco meses del año.

Explicó que eso contribuyó a que el déficit de la balanza comercial se redujera en US$87.3 millones.

Las ventas de productos tradicionales (café, azúcar, banano y otros) lideraron esta tendencia, pues crecieron en 70.8 por ciento (US$331.9 millones).

Las importaciones crecieron 12.1 por ciento respecto del mismo periodo del año anterior.

De Bonilla atribuyó este dinamismo en el intercambio a la plena vigencia, desde julio del 2006, del Tratado de Libre Comercio (TLC) con EE.UU.

La presidenta afirmó que las ventas a EE.UU. crecieron 23.6 por ciento y alcanzaron los US$1 mil 277.4 millones, con lo cual este país se convirtió en el primer socio comercial de Guatemala, por encima de Centroamérica.

Al Istmo se le vendieron US$771.2 millones en el mismo periodo, y por primera vez en muchos años las exportaciones a Europa crecieron en 6 por ciento y alcanzaron los US$174.7 millones, por frutas, algunas plantas ornamentales y legumbres.

El sector exportador

Tulio García, presidente de la Asociación Nacional de Exportadores, abogó por un “tipo de cambio neutro” para seguir fortaleciendo la tendencia exportadora alcista del país.

El empresario explicó que las apreciaciones del quetzal, como las que se registraron en el 2005 y el 2006, afectan la competitividad de algunos sectores.

La presidenta del banco central agregó que el dinamismo comercial es sólo un aspecto de muchos otros que están empujando la economía hacia una de sus épocas de mayor crecimiento.

Factores como el flujo de remesas familiares (US$356.5 millones a junio), la llegada de inversión extranjera directa (US$507 millones al cierre del 2007), una inflación subyacente por debajo de la meta (5.9 por ciento a junio) y la depreciación moderada del tipo de cambio (0.55 por ciento a julio) consolidan estas percepciones, según publicó la prensa local.

Los elementos que se ciernen como amenazas de este escenario optimista son el incremento constante de los precios de petróleo, el alza de algunos alimentos básicos a nivel internacional y el moderado crecimiento de la economía estadounidense.

Aún así, el banco central mantiene la previsión de crecimiento para este año en 5.2 por ciento.

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