POR MARIEN A. CAPITAN
Una reforma que incluya la ampliación de la base del ITBIS y del Impuesto sobre la Renta no cuenta con el respaldo de un grupo de ciudadanos a los que este diario pidió ayer su opinión sobre la próxima reforma constitucional.

La respuesta más común era que más elevados impuestos empeoraría la situación económica que viven actualmente los dominicanos.

Estos aumentos son parte de la reforma fiscal que fue propuesta para sustituir los RD$21,000 millones que dejaría de percibir el Estado por la eliminación de la comisión cambiaria y el desmonte de aranceles que se producirá a raíz de la firma del Tratado de Libre Comercio (TLC).

Para doña Germania Grullón, pensionada, la propuesta es absurda. “Creer que eso es bueno es una cosa completamente absurda. Eso nos va a afectar en todo lo que es la economía familiar porque si aumentan los impuestos eso va en detrimento de los sueldos. Entonces cada día el sueldo rinde menos, tenemos menos poder adquisitivo”.

Victoria Jiménez, empleada privada, aspirara a que el gobierno no grave aún más a los pobres y la clase media. “Yo no estoy de acuerdo con eso. La situación económica está muy mala para las personas de escasos recursos y de clase media. Por eso el gobierno no puede ponernos nuevos impuestos, es más, debería eliminarlos”.

En lugar de poner más impuestos, Israel Vargas exhorta al gobierno a cobrar los que ya existen. “El gobierno lo que tiene que hacer es cobrar el ITEBIS a quien se lo tiene que cobrar, no hay necesidad de ampliar ni de poner nuevos impuestos: con cobrar los que ya existen es más que suficiente. Todos los gobiernos han sido muy deficientes en el cobro de los impuestos”.

CADA DÍA MÁS IMPUESTOS

Miguel Núñez Fernández, técnico de un laboratorio,  ve la propuesta como algo oscuro. “El problema es que cada día los impuestos están subiendo más y cuando uno viene  a ver esto ya no se aguanta. El gobierno tiene que hacer replanificaciones para ver de dónde puede sacar más dinero sin afectar a la población”.

Ana de Peña, bionalista, manifiesta que la población tiene una carga impositiva demasiado pesada como para que le pongan. “Si meten más ITEBIS y más cosas todo se va a disparar otra vez, entonces de nada va a servir que el dólar esté dizque como está, así bajito, si todo está por las nubes. Lo que el gobierno tiene que hacer es bajar los precios de la canasta familiar. Ellos tienen técnicos y asesores para eso, para buscar la forma de cargar menos a las personas más necesitadas y resolver el problema”.

Mercedes Peña, psicóloga, también apela a favor de los más pobres. “Lo primero que hay que hacer es mejorar las condiciones de vida de la gente. Aquí ahora mismo se está pasando demasiado trabajo, sobre todo la masa pobre. Luego que se consiga eso podría actuarse en ese sentido (en el de poner más impuestos) pero ahora no debería ser. Las personas, sobre todo los más necesitados, están muy apretados. Hay que hacer un programa económico para mejorar la economía y ver por dónde hay que irse encaminando”. 

Tras indicar que siempre estará en contra de cualquier impuesto que afecte a las clases necesitada y media, la socióloga Miriam Díaz sostiene que todos los gobiernos han fallado en algo elemental: en cobrarle a los ricos. “Aquí hay una gran diferenciación social, hay demasiada gente con mucha riqueza, con una riqueza no tan bien trabajada ni tan bien habida… a esa gente es que hay que cobrarle para tener más recursos para educación, salud y los otros programas sociales. No estoy de acuerdo con que se amplíe la base del ITEBIS ni con nada parecido”.

Otros, como el doctor Rudyard Corona, están de acuerdo con el aumento del Impuesto sobre la Renta pero no con la ampliación de la base del ITEBIS. “Yo creo que lo del Impuesto sobre la Renta está bien pero lo de ampliar la base del ITEBIS no. Hay que recordar que el Impuesto sobre la Renta se le pone al que más gana y aquí hay gente que ganan muchísimo y no paga los suficientes impuestos. Ampliar la base del ITEBIS, sin embargo, afecta a todos por igual: a los ricos y a los pobres y eso es injusto”.

Respecto a lo que el gobierno tiene que hacer, el doctor Corona entiende que lo ideal es que controle sus gastos. “Lo que el gobierno tiene que hacer es controlar sus gastos porque aquí hay una infinidad de ONG’s a las que se les da dinero (…) y hay dinero que se le da a los políticos y a los parlamentarios. Eso podría reducirse y de esa manera, con un mayor control del gasto gubernamental, se podría corregir el déficit presupuestario”.

Napoleón Cornielle, por otro lado, cree que a quienes deben gravar es a los empresarios y los quienes más tienen. Por ello, no comparte ni que se amplíe el ITEBIS ni que se elimine la comisión cambiara. “Hay que ponerle más impuestos a los empresarios pero de forma tal que no se les afecte demasiado porque tampoco queremos que saquen a todos los empleados para la calle”, agregó Cornielle, que es arquitecto.

Más dual,  el contador Norberto Andujar cree que como parte de los ajustes que tendrá hacer ante la entrada del TLC, el gobierno puede ampliar la base del ITEBIS siempre y cuando deje fuera los productos básicos. Respecto al Impuesto sobre la Renta, no cree que sea factible aumentarlo. Rafaelina Cruz, secretaria, sostiene que todo debe quedarse como está.

Aunque fueron minoría, también hubo quienes manifestaron que están de acuerdo con las medidas. “Siempre que sea una compensación, está bien. La reforma debería ser neutra. Hay que entender que si por la entrada del Tratado de Libre Comercio se van a desmontar aranceles, el gobierno debe que compensar o ampliando la base del ITEBIS o creando otros impuestos”, señaló Leonardo Ramírez, contador.

Un poco más cauto, el administrador Fernando Rodríguez Montan sostuvo que el gobierno debe compensar por algún lado pero que debe tener cuidado en cuanto tipo de artículo que se piensa gravar. “Yo entiendo que el gobierno tiene que buscar compensación si va a desmontar los impuestos arancelarios para poder equilibrar el presupuesto. No quiere eso decir que me identifique con la gravación de artículos específicos… pero necesariamente los gobiernos tienen que avocarse, cuando desmontan un impuesto, a buscar uno que le compense para estructurar el presupuesto de gastos y de recaudación”.